Guru Puja.

Shudy Camps Park, Shudy Camps (England)

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Guru Puja. Shuddy Camps, Reino Unido. 13 de julio de 1987.

Hoy es un gran día porque estáis aquí, en el reino del corazón del Universo, para adorar al Guru; si podéis hacer esto en vuestro corazón no tendréis que hacer nada más. Hoy también siento que tengo que hablaros de Sahaja Yoga y su valor en relación con otros yogas que fueron aceptados en tiempos antiguos en todo el mundo.

Lo que en un principio se llamó Yoga, (no Sahaja Yoga) comenzó con las distintas prácticas de “Ashtanga Yoga” (el yoga de las ocho dobleces o posturas de Patajali). Dirigidos por un Guru, tenían que pasar por muchas dificultades; a nadie que estuviera casado se le permitía practicar Ashtanga Yoga, tenían que dejar sus familias y todas sus relaciones. Así que, tenían que convertirse en personas absolutamente desapegadas para ir al Guru, y abandonar todas sus propiedades y posesiones. No para dárselas al Guru como ocurre actualmente con los falsos gurus, sino que simplemente se deshacían de ellas. Y a esto se le denominaba Yoga.

Luego apareció otro estilo de acercamiento llamado Sankhya, que consistía en reunir cosas en la vida con desapego para luego distribuirlas. Después, iban a un Guru con completa entrega, y entonces recibían la Realización. Sankhya era el camino del lado izquierdo y Yoga el del derecho. En el Sankhya se utilizaba el Gayatri Mantra, porque solían ser personas del lado izquierdo. Se fueron tanto al lado izquierdo reuniendo cosas, posesiones, propiedades, reuniendo todo tipo de relaciones y de sociedades, que tenían miedo de ser arrollados y perderse entre esas cosas, y así acudían al Gayatri Mantra, el cual os enseña la esencia de todos los chakras o centros.

Ya os he hablado de esto antes: Bhuh, Bhur, Swaha…etc. BHUH significa la Esencia, el Bija del Muladhara; BHUR es el Universo creado, es el Bija del Swadishthana; SWAHA es el Bija del Nabhi; MANAH en la esencia del chakra del Corazón; JANAH es la gente o la colectividad, es la esencia, el Bija del Vishuddhi; TAPAH es donde entramos en tapasya, en la renuncia, en las privaciones, es la esencia del Agnya chakra. Y finalmente SATYAH, que es la Verdad, la Esencia del Sahasrara. No la Verdad que nosotros consideramos como Verdad, sino que es la Verdad que se expresa en nuestro sistema nervioso central. Esto se descubre en la séptima etapa, el Sahasrara.

Así, la gente que practicó Sankhya no eran demasiado respetados como gente espiritual, porque se pensaba que estaban muy envueltos en cosas y propiedades mundanas, y por tanto se les consideró como secundarios. Y sin embargo, aquellos yoguis que habían ido a un Guru eran considerados más elevados puesto que habían dejado todas sus pertenencias.

Pero, a pesar de ello, estos gurus tenían sus problemas ya que encontraron que los yoguis que acudían a ellos habían abandonado todo sin duda, pero todavía escondían apegos. Incluso en los ashrams se apegaban a las cosas. Externamente habían abandonado todo pero internamente no, todavía seguían enganchados a esa ideas de poseer pequeñas cosas. Tomaban pocos compromisos, como ahora en los conventos y esos lugares.

Por tanto, estos dos tipos de Yoga eran, en cierta manera, artificiales. Por un lado estaban los Sankhyas que intentaban ascender llevando consigo todo el equipaje y por otro lado (los seguidores del Yoga) que descendían interiormente a causa de su ambición por las cosas, pero que externamente presentaban una ambición por ascender. Todo esto era una cosa extraña en todos los aspectos. Y aún hoy se puede ver este tipo de contradicciones entre la autoindulgencia y la represión. Es como si vais a América y veis, “¡oh, Dios mío!, esto no es democracia, sino demonocracia”, (libertad para todo, la ‘libertad’ que se ha convertido en desenfreno). Pero, si vais a otro país, como Rusia, os preguntáis: “¿Qué es esto?, aquí se trabaja bajo presiones y temores”, pero tan pronto como un ruso sale de su país puede ser incluso peor que un americano.

Entonces, ¿qué es esto?: una teoría funciona aquí y otra funciona allí. Así, pues, ¿cuál es la teoría correcta? Ocurre lo mismo con la religión. Hay religiones que conocen muchos dioses como los hindúes, pero ahora están creyendo también en los bhuts, siguiendo el camino de las posesiones. Si visitáis un templo observaréis que reúne las condiciones para que seáis poseídos. Lo mismo con cualquier iglesia o mezquita donde Dios tiene que residir, y sin embargo, sois atacados de repente, saliendo de allí completamente asombrados de vosotros mismos, acabando en un manicomio. Entonces, ¿qué lugares de adoración son esos, en los que vais a adorar a Dios y en lugar de esto sentís todo tipo de fuerzas satánicas atancándoos?

Por todo esto, actualmente la gente se siente muy confusa; no encontramos verdad en nada, en ninguna ideología, ni filosofía. Confuncio comenzó con el humanismo, Sócrates comenzó con otra cosa, lo mismo con Mahoma quien dijo: “Vamos a adorar a Dios no como a un ídolo sino en su forma de Nirakara, en su aspecto sin forma”. Pero, ya veis, cuán lejos han llegado con el aspecto ‘sin forma’, ahora se están matando unos a otros. Después de ver un país musulmán, no podéis creer que exista un Dios sin forma o con forma, en ninguna parte, todos se deben haber ido corriendo al verlos luchar de esa manera.

Luego tenemos los países cristianos; allí donde han ido han intentado dominar a los pueblos que no eran cristianos. Se creían con derecho a hacerlo solo por ser cristianos, discípulos de Cristo, quien dijo: “¡Perdónalos porque no saben lo que hacen!” Yo, ahora, tengo que decir esto mismo de los cristianos: “¡Perdónalos, porque no saben lo que hacen!” Y cuando os sorprendáis de todas estas cosas, deberíais sentaros y pensar qué hay que hacer, cuál es el problema.

No se trata ni de un camino ni del otro, ni de Sankhya ni de Yoga, lo que hay que alcanzar es Sahaja Yoga. Sahaja Yoga es un sistema en el que, en primer lugar, no se os da una teoría, sino una luz en vuestras manos para que veáis por vosotros mismos. En esta luz ambas cosas parecen ser lo mismo, la contradicción Sankhya-Yoga son las dos caras de la misma moneda. Por ejemplo, ahora tenéis esta casa, Shudy Camps, hecha para vuestra Madre, aunque vuestra Madre no puede apegarse ni siquiera a un alfiler. Es una situación graciosa. Todo el mundo tiene que recordarme, “¡Madre, es tu casa!”, y yo digo: “¡Ah, sí!” Y tengo que agradecéroslo a todos, especialmente a los ingleses y a los líderes ingleses, el haber hecho este esfuerzo para conseguir esta casa. Pero, luego pienso, por qué debería agradecerlo si la casa no es mía, es de ellos. Y efectivamente, así es.

Encuentro que esta confusión es realmente muy dulce y hermosa . De hecho, nada nos pertenece y al mismo tiempo todo nos pertenece. Cuando pienso en los hermoso que habéis puesto este lugar, entonces me pertenece, sí, digo: esta casa me pertenece, Inglaterra me pertenece y por encima de todo, el mundo entero me pertenece.

Podéis ver cómo Sankhya y Yoga se convierten en una sola cosa, en Sahaja Yoga. Y se dice que, cuando uno puede ver Sankhya y Yoga como una sola cosa, entonces tiene lugar ‘Apa-Sati’, el que ve, el Testigo.

Puede que los no sahaja yoguis se pregunten, ¿cómo es que vuestra Madre, que es un Guru, lleva todo tipo de ornamentos? Pero, ¿qué se puede hacer? Ella también es una Madre y además una Diosa. ¡Otra confusión!

¿Cómo hacer compenetrar estas dos cosas? Un Guru se supone una persona austera, estricta, vestida de una forma muy simple, ¡aunque no sé si con la ropa al derecho o al revés!, con una vara gruesa en su mano, nunca sonriente, y de reír ni hablar, ni siquiera sonreír; con caras largas y tenían que dejarse barbas largas, muy largas. Y no se permite que sean mujeres. En esta situación a las mujeres no se las tendría que ver, y ni yo misma podría ver mi cara.

Hay una gran discusión entre los teólogos sobre si una mujer puede o no realizar prácticas espirituales, ¡Imaginadlo! Y os sorprenderá saber que esto no solo se da entre los cristianos, sino que también aparece en las escrituras de la India, donde se debate si una mujer puede o no llevar a cabo una práctica espiritual.

Ahora bien, cuando vuestra Madre es una mujer y a la vez es vuestro Guru, ¿qué haréis? ¿Veis?, ¡aquí tenéis otra confusión! Porque la base esta confundida, todo esto es falso, no está fundado sobre ninguna base. Utilicéis el argumento que utilicéis para decir que las mujeres no están hechas para la vida espiritual , fracasará.

El otro día me encontré en la universidad con un alto cargo, una persona importante pero difícil, y me dijo: “Nosotros los cristianos no podemos aceptar que una mujer sea Dios”. Y dije: “¿Por qué no?”

Así, para poner del derecho todas estas historias que están al revés, vuestra Madre tuvo que venir a esta Tierra como un Guru. Y llegar hasta este punto después de una pequeña confusión sobre mí misma.

El otro día alguien insistía en que me compraría un brazalete, pero dije: “No, ya no me queda dinero, no quiero comprar nada más”. “De acuerdo, se lo regalaremos en el Guru Puja”. Le dije: “Comprar un brazalete en un Guru Puja es algo raro, a un guru no se le compra un brazalete, ¿no?; se le suele comprar una vara o unas sandalias de sándalo, o un chal”. Pero ahí estaba la situación, se me había preguntado si me lo ofrecerían para el Guru Puja. ¿Cuál era la razón? Y me volví consciente de mi propia confusión; cuando pensé en ello dije: “De acuerdo, regalad el brazalete en el Guru Puja”. Llegué a ver la cuestión tal y cómo era, que esto tenía que ocurrir ahora así, que en el Guru Puja regalarais un brazalete a vuestro Guru. Cambiemos pues todo, todo tiene que mejorar de esta forma, y llevarlo a un mejor nivel de entendimiento, de forma que todo se encuentre con la realidad. Todas estas falsas ideas han de descartarse. Si ponéis una alfombra al revés, todo su dibujo se ve al revés, lo cual no ocurre si la alfombra está al derecho. Por todo esto necesitabais a una Madre que os diera la Realización y a un Guru que, como Madre, os enseñara que nadie puede ser excluido en el ascenso hacia Dios.

Así es cómo esta funcionando Sahaja Yoga hoy, en todas las direcciones, para poner del derecho todas las cosas que están del revés, para exponer todo a los ojos de la realidad y para traer los valores reales destruyendo los sistemas de valores corruptos; para poner todos los sistemas políticos y económicos, todas las teologías espirituales, psicológicas y todo este sin sentido en la dirección apropiada. Con una sola encarnación todo esto ha funcionado, imaginadlo, solo con una encarnación todas esta ideas han sido corregidas.

Entre los hindúes existe también la idea de que una persona religiosa debe ser vegetariana. Todos los brahmines creen esto e incluso los no brahmines. Pero había un brahmín en uno de los lugares donde yo vivía; los sahaja yoguis le explicaban que Madre tenía que comer carne, puras proteínas. Él entendió esto. Tanto brahmines como no brahmines comprendieron que Madre tenía que comer proteínas, porque Ella tiene que beberse la sangre de todos estos raksasas, entonces, ¿cómo podría Ella ser vegetariana? Si tiene que matar tantos demonios, ¿cómo puede ser Ella no violenta?

Así se explica el contraste que se encuentra en la descripción de la Madre. Ella es la personalidad más furiosa en lo que se refiere a matar a la gente negativa que intenta destruir su propia Creación y a sus propios niños, y, al mismo tiempo Ella es muy dulce y suave para con sus niños. Estas dos ideas opuestas son aspectos complementarios de la Verdad. Incluso en los animales aparece este mismo contraste. Pero en una encarnación como esta, es algo muy evidente. Y hoy, a través de Sahaja Yoga, hemos podido demostrar que Sankhya y Yoga son la misma cosa. Tanto si coleccionáis cosas o posesiones, como si las dais o regaláis, ambas cosas no son distintas para una persona que está desapegada interiormente. Si reunís cosas para los demás es aún mejor. Pero si acumuláis cosas para vosotros y después las dais, es todavía mejor. Porque primero acumuláis pensando en vosotros, “esto será bueno para mí”; de alguna forma vuestro ser está ahí, pero luego eso mismo lo dais, lo regaláis; eso significa entonces que vuestro desapego es completo.

Y la tercera personalidad sería como yo, la que constantemente reúne cosas y está dando, sin pensar reúne cosas y sin pensar las da. Porque pensar no es mi trabajo, esa es una de las cosas que yo he descartado o dejado: el pensar. Yo no quiero pensar. Ese es vuestro trabajo, no el mío. A través de Sahaja Yoga, ¿cuántas cosas hemos logrado sin pensar? Shankkya y Yoga son ambas producto del pensamiento y no resultado de la espontaneidad.

Esta misma casa, Shudy Camps, es un producto de la espontaneidad. Llevé conmigo a un ‘sadbloks’ como los ingleses lo llaman, para ir a ver varias casas; buscaba lo que ellos llaman casas de carácter, estas que se salen de lo corriente, “torcidas”, las querían a cualquier precio; les dije: “No, no quiero ese tipo de casas”. “Pero es una casa de carácter”, me dijeron. “Pero no quiero esta especie de nariz torcida, debe ser una casa firme”. Ellos estaban algo decepcionados conmigo. El ‘sadblok’ tuvo otras ideas como, por ejemplo, si compras en un lugar en el Sudeste será elegante, si vas al Norte será más normal y si vas al Este será mediocre, inhabitable. Entonces les dije: “vamos hacia el Norte, lo más que podamos, porque como sabéis la Diosa es Dakshina Murti. Ella tiene que estar en el Norte para poder tener sus ojos hacia el Sur. Allí es donde tiene que estar.” No podríamos haber ido a Escocia, eso hubiera sido demasiado para vosotros; aunque hubiera sido el ideal para todos nosotros, porque entonces nuestra ‘drsti’ (visión) estaría dirigida hacia el Sur y veríamos así el Universo entero bajo nuestra propia hermosa visión.

Y así es como, espontáneamente, encontramos este lugar mientras el ‘sadblok’ estaba “sí, sí, no, no, sí”. Pero lo encontramos espontáneamente, y luego supimos que tiene una historia. También vimos sus hermosas vibraciones, y el potencial que tenía. Cualquier cosa que obtenéis espontáneamente, tiene un gran potencial.

Respecto a este punto tengo que decir unas cuantas cosas. Es importante, y debo mencionar algo en lo que a espontaneidad se refiere. Es muy importante ver como la gente cree que funciona la espontaneidad. En la mayoría de los casos es el ego el que dice que algo es espontáneo; esto es así en muchas personas, especialmente en los sahaja yoguis antiguos, que creen que son autoridades de lo espontáneo. Como un terreno que teníamos en Vaitarna; uno de los antiguos sahaja yoguis fue allí y dijo: “Esta tierra está vibrada y aquella tierra no está vibrada”. Así que, todo el mundo lo aceptó, diciendo: “¡Vale, vale!” Y luego siguió: “En esta parte del terreno nadie debería sentarse a comer”. Pero, ¿de dónde viene este conocimiento?, comer no es un pecado, ¿no? Pero parecía que fuese un pecado el comer allí.

Los demás siguen todo ABCDEFGH….Z y luego otra vez ABCDEFG…Sahaja Yoga ha llegado hasta un punto tal que comencé a pensar: “Ahora ellos se han convertido en otro grupo, un grupo de sahaja yoguis fanáticos”. Sin embargo, el fanatismo está absolutamente en contra de Sahaja Yoga.

Preguntarán: “¿Cuántas veces hay que decir este mantra?” Y entonces yo les digo: “¡Cero veces!” “¿Cuántas gotas de gui debemos ponernos en la nariz?” Y les digo: “¡Un bote entero!” Otros dicen: “¡Oh!, no debería haber actuado desde el lado izquierdo sino desde el derecho”. Entonces, yo os diría: “¡Pues salta!” Tenéis que ser como niños. Ahora las ideas en Sahaja Yoga están asentadas, lo cual es normal después de tantos años, pero no deberían ser ideas tan fijas, porque entonces no son ni sahaja ni espontáneas. El decir, “si lo haces así o asá está mal”. ¡Nada de eso!, nada debería estar mal para vosotros, puesto que, si hacéis algo mal perderéis las vibraciones y se acabó. ¿Por qué hay que ser tan cauteloso?

Como alguien que dice: “No quiero mirar ese cigarro”. “¿Por qué?” , le digo. Y contesta: “Porque solo mirarlo ya es pecaminoso”. Le digo: “¿Qué pasa si lo miras?” “Que tengo ganas de fumar”. “¡Pues, fuma de una vez por todas!” Otro caso: “¡Madre, yo no puedo tener una botella de vino en mi mano!” “¿Por qué?” “Porque coger una botella de vino es pecaminoso”. “Quiero decir, ¡podéis nadar en vino si así lo queréis!” (Risas).

Por tanto esta discriminación debe estar en vosotros. Aunque siempre os lo he dicho: si digo algo, os agarráis a ello de una forma tal, que tengo que decir enseguida lo contrario. No os peguéis a nada. Sahaja Yoga no consisten en pegarse a algo.

Por ejemplo, alguien que ha aprendido algo de Sahaja Yoga en sus comienzos, como algún mantra, y todavía sigue estancado en este primer paso. Pero debéis avanzar, se trata de una escalera; no os quedéis atascados en ningún punto. Hemos tenido tantísimos casos aquí. La gente se queda obsoleta (como un abrigo del que os deberíais haber desecho hace tiempo), que no dejan de decir a los demás cosas sin sentido, como que si tal cosa la hacemos así, tal cosa ocurrirá.

En primer lugar, no deis ideas a los demás. Si realmente decidís no decir lo que va mal en otra persona, entonces la mitad de vuestro trabajo está hecho. Porque vosotros no tenéis que hacer ningún trabajo, de la misma forma que yo tampoco tengo que hacer nada.

La gente se ha vuelto tan fanática en el conocimiento que, incluso a la gente nueva, le dirán: “tú eres un bhut”. Y en lugar de ayudarles, dicen: “dejemos que siga con él”. Me llegan noticias de gente que dice: “Tus sahaja yoguis son gente muy cruel, porque dicen a la gente cosas como: eres un diablo o estás poseído, o eres esto o aquello. Son muy crueles”. Me quedé realmente conmocionada al oír esto sobre los sahaja yoguis. ¿Cómo pueden ser crueles? Si, por ejemplo, alguien está padeciendo de algo y les dices: “¡Oh, estarás mejor si sigues como estás, es bueno para ti!” Esta no es la manera.

No solo tenemos que ser humildes, sino que debemos tener mucho tacto y ser muy dulces con la gente nueva, si queréis que venga. Pero si habéis decidido que no queréis que venga más gente, entonces no tengo nada que decir. Sin embargo, si queréis que otros vengan, es muy importante que les habléis de una forma muy dulce y amable. La rudeza, la arrogancia y el alardeo no sirven de nada.

Entended que Sahaja Yoga es estar en completo gozo. Cuando estáis completamente sumergidos en este gozo, ¿dónde está el tiempo para recordar cuántas veces nos tenemos que dar un bandhan?, ¿qué necesidad hay de daros un bandhan a vosotros mismos? Ahora todo es una broma para vosotros. O debería serlo. Un bebé toma la leche del biberón absorbiéndola porque no tiene dientes. Pero, vosotros, ¿cómo es que os comportáis como un bebé? Es muy infantil y muestra que no hay un crecimiento en absoluto.

Los sahaja yoguis deben crecer interiormente. No deberíais ser considerados más como inmaduros. Yo diría que un sahaja yogui que es maduro, es a la vez flexible y tiene discernimiento, es una persona que puede combinar muchas cosas juntas, que sigue unas hermosas líneas y mantiene sutiles maryadas. Debéis ser diplomáticos, con una respuesta variada y adaptable, en concordancia con la situación.

Vosotros no podéis hacerlo al revés. Por ejemplo, alguien que sin tener en cuenta la situación dice: “Ahora seré dulce, ahora estaré enfadado, luego estaré así, y luego asa”; esta persona será una rara mezcolanza, una personalidad rara. La gente pensará que os dedicáis a bailar ‘bharata natyam’ (una danza clásica). Mostrando todos vuestros cambios de humor, en cinco minutos mostráis vuestros diez diferentes humores, sin tener en cuenta las necesidades del momento.

La respuesta flexible viene del crecimiento interior. Tenemos que crecer. Y para crecer tenemos que tener silencio interior. No reaccionéis ante otros; “esta persona es así, esta otra es asá”. ¿Pero, y vosotros?

Luego hay otras cosas que también hacéis. Como cuando le digo algo a una persona que tiene un determinado problema. Entonces, ésta va inmediatamente a otra y le dice: “Mira, Madre me ha dicho que tú también tienes este problema y que es mejor que lo cuides”. “Pero, yo no se lo dije a esa persona, te lo dije a ti, guárdalo para ti”. Así que, este “Madre dice…” se tiene que acabar absolutamente. Si Madre tiene que decir algo, lo dirá. ¿Por qué habríais vosotros de decirlo o comunicarlo si nunca os pedí que lo hicierais?

La comprensión de Sahaja Yoga es muy simple, extremadamente simple, cuando entendéis una cosa: que debéis mantener vuestra inocencia intacta. Ahora bien, la gente dirá: ¿cómo hacernos inocentes? El cómo hacernos inocentes es un círculo vicioso. Tenemos que volvernos inocentes, pero a través de qué, ¿de vuestro ego o superego? ¿cómo llegaréis a la inocencia?

(Madre interrumpe su conferencia y se dirige hacia algunos yoguis que mecánicamente suben su Kundalini. Entonces, dice: “No subáis la Kundalini. Yo estoy aquí , ¿qué estáis haciendo?, ¿qué ocurre? Estoy aquí, y la Kundalini está encima de vuestras cabezas. ¿Qué estáis subiendo?).

Como os decía, el problema es cómo conseguir la inocencia. Lo dije al principio, es muy simple: ¡Dejad que vuestro Guru resida en vuestro Corazón! ¿Por qué preguntáis cómo hacerlo o conseguirlo? Dejad que lo haga Madre. “¡Madre me dirige!”; agarraos a eso y vuestro lado derecho se limpiará. El lado izquierdo se limpiará cuando digáis: “¡Nadie puede dirigirme, solo Madre!” ¡Poned ambas cosas juntas y todo funcionará! Gracias a Dios tenéis a alguien como yo aquí, y podéis decir esto con tanta seguridad. Pensad en aquellos que no tenían a nadie que les dijera nada, que estuviera en su presencia, o que les dijera: “¡Yo puedo manejar esto y vosotros podéis conseguir tal cosa!” Así es cómo os equilibráis.

Permitid a vuestra Kundalini crecer. Todo funciona, como cuando compré esta casa o cuando la compraron ellos, o quienquiera que la comprara. .. surgieron tantas preguntas y tantas complicaciones. Pero funcionó. La casa está ahí, intacta. Nada se ha derrumbado, no ha habido ningún problema. Tuve que gritar en una ocasión, de acuerdo; pero dejadme que grite. No empecéis a gritar vosotros. Tan pronto como yo deje de gritar, ellos cogerán un micrófono y empezarán a gritar aún más alto: ¡”Madre dijo así y asá acerca de esto y aquello!” Pero yo os lo decía a vosotros o sea que, ¿a quién estáis predicando?

Lo único que debéis saber es que cuando yo os digo algo, ¡por favor, hacedlo! Sabéis que yo sé mucho, porque soy un Guru, vuestro Guru, ya que soy el Guru de todos los gurus; y aquellos que son gurus realmente saben que, “mi Madre sabe todo. Ella es el conocimiento mismo. Si ella dice algo, significa algo”. Pero incluso si os pongo a prueba, importa. Así es cómo os convertís en gurus. Shivaji tuvo un guru llamado Ramdasa; en aquellos tiempos los gurus solían someter a muchas pruebas a sus discípulos. Yo no os he sometido a pruebas así. Vosotros os ponéis a prueba a vosotros mismos, eso es todo. Bien, el guru de Shivaji dijo: “Necesito la leche de una tigresa, tengo que beberla”. La mitad de los discípulos casi murieron al oírlo, y la mayor parte de ellos no lo oyó. Shivaji dijo: “De acuerdo, yo la traeré”, y fue a la selva donde se encontró a una tigresa con los cachorros tumbados a su lado. Al verlos Shivaji hizo namascar, y le dijo: “Mi Guru quiere tu leche”. Eso es todo. Los Gurus son Parabrahma y por tanto sus órdenes son escuchadas por el Parabrahma en todas las escrituras. “Mi Guru Shri Ramdhasa quiere tu leche, así que por favor, ¿me darías tu leche? La tigresa se levantó y quedó quieta delante de él; así ordeñó la leche para su Guru.

Así es: ¿Habéis entendido el significado del Gurupada (el poder del guru)? Cuando os hacéis absolutamente uno con lo deseos de vuestro guru, alcanzáis la posición del guru. Pero si todavía os queda en la cabeza alguna idea privada sobre algo, entonces como dijo guru Ramdhasa: “De acuerdo, veamos vuestro coraje: id y cuando os rompáis la cabeza volved de nuevo, yo os curaré”.

Por tanto es muy importante que hagamos una cosa muy seriamente: Tomar a vuestra Madre muy en serio cuando os pide algo. Naturalmente, en inglés siempre digo, por favor, ¿podéis hacer esto?” O alguna vez puede que diga: “Me temo que debo pediros si, por favor, haréis esto”. Sin embargo, no debería importar la forma en que lo diga.

Como el otro día cuando íbamos a Cardiff, dije que el vagón de primera clase iría al final del tren. Pero alguien en la estación dijo, “no, estará en el otro lado”. Así que, nos sentamos. Y luego anunciaron que la 1ª clase estaba al final de tren. Por tanto, tuvieron que volver atrás otra vez. Está bien para esta gente, no importa que se equivoquen, pero, ¿qué pasa con vosotros?

Habéis visto muchas veces que debéis aceptar las peticiones de vuestro guru. E incluso si algo va mal debería ser siempre aceptado como la Ley del Divino. Porque el Guru os da la Ley divina, y es, por tanto, absoluta, a diferencia de la ley mundana. Cuando entendéis la Ley del Divino, entonces tenéis que rendiros a ella, de este modo os convertís en maestros de ella.

Hoy, para el Guru Puja podría continuar hablando de muchas cosas, pero os pediría en particular que entendierais por qué la “entrega”, como lo denominan en el Islam, es tan importante. Si Dios es vuestro Guru, entonces permitidle que os guíe: “Hágase tu voluntad”. No nos guiemos a nosotros mismos. Incluso a veces tratamos de guiar también al Guru. Entonces, el Guru os pone trampas, vosotros caéis y finalmente os dais cuenta que habéis ido demasiado lejos. Es mejor escuchar al Guru y hacer lo que dice. Todo lo que dice el Guru es correcto. Los gurus pueden pediros que hagáis cualquier cosa. Quiero decir, ¡soy un guru bastante agradable! Como Randhasa, que dijo a sus discípulos que tenía una infección grande en el pie con algo muy séptico dentro y lleno de pus, y les pidió que por favor, intentaran chuparla porque estaba llena de pus. ¡Imaginadlo!, ellos pensaron que chupar el pus del guru era demasiado. Pero Shivaji se acercó y quitándose su turbante se sentó a su lado y comenzó a absorberlo. Luego dijo, “es muy dulce”. De hecho había extraído mango de ahí. Así es cómo los gurus prueban a sus discípulos. Yo nunca os he sometido a ninguna prueba, así que, vosotros no sometáis a nadie a ninguna. Dejádmelos a mí, yo me las arreglaré con ellos, uno por uno.

Cualquier cosa que haya de ocurrir, ocurrirá. En Sahaja Yoga, pensar que el 100 % de las personas serán ricas, con buena salud y que estarán en la cima del mundo, es una tontería. Si tenéis mucha riqueza, habrá una recesión porque los demás serán muy pobres. Si tenéis demasiada buena salud nadie se acercará a vosotros, porque vuestra apariencia será la de un atleta de lucha libre. Si os hacéis personas demasiado sabias, entonces la gente estará asustada de gente tan sabia, no entenderán nada, ni nada les entrará en la cabeza. Así que, estemos en el centro. Deberíamos tener salud, pero no demasiada; deberíamos ser sabios, pero no demasiado.

Hasta ahora todo va bien, así deberíamos seguir. Guardemos nuestras maryadas y seamos buenos sahaja yoguis, amables con los demás, capaces de atraer a más gente y de proyectar una imagen de personalidad magnética. Esto es lo que tenemos que hacer. No alardeéis de nada, he visto a algunas personas hacerlo sin necesidad. Simplemente estad en el fondo. Pero si, por contra, estáis mucho en el fondo, entonces tenéis que salir a primer plano un poco. Intentad equilibraros, observaros, guiaros, y deciros a vosotros mismos lo que debéis hacer. CONVERTÍOS EN VUESTRO PROPIO GURU. Juzgáos a vosotros mismos para ver a qué distancia estáis del centro, hasta qué punto estáis creciendo, cuánto habéis logrado. ¿Estáis todavía apegados a cosas pequeñas? ¿Os sentís molestos todavía por pequeñeces? “Madre, solo he obtenido el 75% de los puntos y debería haber obtenido el 80%”. ¡Oh, Dios mío! Si solo ha obtenido un 75%, algo bueno tiene que salir de eso. Tenía que aprender una lección o quizá tenía que hacer otro curso. Quizá se estaba llevando a cabo algo bueno para su ascenso, así es cómo tenéis que ver las cosas si vais a ser gurus. Si vosotros no podéis ver esto, entonces, ¿cómo lo verán los otros? Tenéis que daros cuenta de esto. No “ponerlo en la mente”, sino “daros cuenta” en el corazón. Debéis ver esto en el reino de vuestro corazón, ahí debéis comprenderlo.

Es agradable que estemos en Inglaterra, en el Corazón del Universo, hablando de la apertura de nuestros corazones. Si tenéis que ponerme en vuestro corazón, recordad que soy el Océano de Amor. Y para contener este Océano de Amor, tenéis que tener un corazón muy grande, más grande que vuestra personalidad, más grande que vuestro país, más grande que este mundo, más grande que este Universo.

Que Dios os Bendiga.