Shri Buda Puja: “Debéis superar los deseos”.

Brielpoort Deinze, Deinze (Belgium)

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Shri Buda Puja: “Debéis superar los deseos”. Deinze, Bélgica. 4 de agosto de 1991.

Hoy nos hemos reunido aquí para hacer un Puja a Buda. Como sabéis Buda era el hijo de un rey, y un día se quedó perplejo al ver a un hombre pobre, muy delgado e infeliz caminando por la calle y se sintió muy triste. Luego vio a una persona muy enferma a punto de morir y a continuación vio a un hombre muerto que era llevado al campo crematorio. Todo esto le desconcertó mucho y empezó a pensar sobre ello y a buscar la razón de todos estos acontecimientos, en la vida del ser humano. ¿Por qué se vuelven tan miserables o enfermos, y por qué mueren tan miserablemente? En su búsqueda encontró una razón para todo esto. Recorrió el mundo entero, leyó todos los Upanishads, fue a muchos gurus, a muchos lugares de tradición espiritual, como Benarés; no hubo lugar al que no fuese y, finalmente, se sentó bajo un árbol “banyan”, allí, su Kundalini fue despertada por la Adi Shakti y obtuvo su Realización. Entonces comprendió que la razón de todo esto es el deseo.

En Sahaja Yoga hemos comprendido ahora que no todos nuestros deseos son deseos puros. Primero, porque por muchos deseos que llevamos a cabo, no nos quedamos satisfechos. Y segundo, porque todos estos deseos tienen una repercusión. ¿Cuál es el deseo puro? Todos vosotros lo sabéis, es la Kundalini. La Kundalini es el poder del deseo puro, que satisface nuestro deseo puro de ser el Espíritu, de ser Buda, de ser iluminados. Buda significa persona iluminada. Gautama se convirtió en Buda, igual que vosotros os habéis convertido en sahaja yoguis. Pero debido a que atravesó muchas penalidades todo lo que aprendió se convirtió en parte inseparable de Él mismo. En Sahaja Yoga, sin embargo, todo es “sahaja”, siempre concluimos que finalmente algo es “sahaja”. Y, cuando trabajamos en algo decimos: “Funcionará espontáneamente, no hay que preocuparse, Madre lo hará por nosotros…” Es un sentimiento muy común en Sahaja Yoga. Poneros delante de este largo proceso o daros la Realización era el dilema que se planteaba ante mí. Porque en estos días de confusión no hay mucho tiempo para que paséis por todo aquello por lo que Buda atravesó, y Él era uno, mientras que vosotros sois muchos, por lo cual hubiera sido muy difícil y no sé cuántos hubierais resistido, seguramente la mayoría hubierais abandonado a la mitad del camino…, o a la cuarta parte del camino. Por eso se hizo de una manera “sahaja”. Sin tener que sentaros bajo un árbol “banyan” obtuvisteis vuestra Realización. Vuestra Kundalini fue despertada y obtuvisteis vuestra iluminación, pero esta iluminación no se establecerá si Buda no está establecido en nosotros, porque vuestros chakras no están limpios como los suyos. Tenemos el mismo cuerpo, la misma mente, y la misma actitud que cuando obtuvimos la Realización. Antes mirábamos hacia la casa de Dios y seguimos “mirando” hacia ella. Sin embargo, vosotros ya habéis entrado dentro de ella y ahora tenéis que mirar fuera, a través de las ventanas, pero esto lo olvidáis. Y aunque estáis sentados en lo alto de la montaña, debido a todos los condicionamientos, cuando veis venir coches, aunque sea un solo coche, os asustáis porque no sabéis que estáis en la cima de una montaña, en la cual os ha colocado delicadamente vuestra Madre. Y así es cómo os comportáis. Cuando me relaciono con sahaja yoguis me sorprende bastante ver que no saben que son almas realizadas. Por eso Buda habló de la “ausencia de deseos”, lo cual no es posible antes de la Realización, incluso después veo que es difícil. Una especie de deseo sutil subyace todavía y allí donde tenéis que trabajaros algo no lo hacéis, diciendo que vuestro ego subiría. Así que, cuando os viene bien os trabajáis esto, cuando os viene bien os trabajáis aquello. Pero la solución a todo esto es una que yo misma he encontrado, y es que “es un acontecimiento colectivo”. Un individuo jamás puede librarse de su ego; una persona individualista jamás puede librarse de su ego. Aquel que vive individualmente quiere disfrutar de todo individualmente y no podrá librarse de su ego, ¿por qué?, porque no ha atravesado por todas las penalidades por las que atravesó Buda. Si queréis conseguirlo individualmente, primero pasad por todas esas penalidades y luego volved. La solución está en limpiar nuestros chakras, limpiar vuestra vida en la colectividad. Antiguamente la solución para liberarse del ego era, como todo lo demás, individual; como ir a los Himalayas, seguir a un guru que luego te echaba, ir a otro guru, trabajar para él, aunque finalmente te echaba y cuando un guru te aceptaba, eras golpeado, torturado, maltratado de todas las formas posibles, colgado boca abajo y finalmente, si el guru estaba cerca, te daba la Realización. La situación era esta.

Pero en Sahaja Yoga la puerta está abierta; cualquiera puede entrar, cualquiera, y obtener su Realización. Porque yo tengo fe en la colectividad. Esta colectividad, esta vida colectiva os dará, con toda seguridad, lo que Buda obtuvo a través de sus esfuerzos individuales. Pero es en esto donde fallamos, porque no sabemos cómo ser colectivos; el individualismo está a nuestro alrededor; nuestra manera de pensar es individualista para todo. Allí donde la colectividad ha funcionado, Sahaja Yoga ha prosperado y allí donde no ha funcionado ha habido problemas. Por eso, es muy importante que nos miremos a nosotros mismos y por nosotros mismos veamos “cuán colectivos somos”. ¿Disfrutamos de la colectividad o no? ¿Deseamos encontrarnos con la colectividad o no?

Tan pronto como pensé en Cabella, en el lugar que habéis visto, pensé en hacer un pequeño ashram allí, con el río para vosotros, e inmediatamente vino gente a preguntarme: “¿Madre, está bien si compramos muchas casas particulares aquí?” Inmediatamente. ¿Para qué? Luego me dirán: “Madre ven a mi casa a cenar”, “por favor, ven a mi casa a tomar el té”. No me interesa.

En Sahaja Yoga hasta que no os volvéis colectivos en todos los sentidos, no podéis ascender y no podéis limpiaros a vosotros mismos. Este punto no lo dijo Buda, pero lo sugirió de alguna manera, porque dijo “Buddham Sharanam Gachami”: “Primero me entrego a mi autorrealización”. Luego dijo “Dharman Sharanam Gachami”: “Me entrego al dharma que hay dentro de mí”. Esto es espiritualidad. En tercer lugar dijo “Sangham Sharanam Gachami”, sangha significa colectividad: “Me entrego a la colectividad”. Pero Él no sabía cómo dar la Realización en masa en aquella época. Tenía muchos discípulos que debían afeitarse la cabeza fueran reyes o reinas; que debían llevar una sola prenda de ropa, fuesen hombres o mujeres; que tenían solo un jergón para dormir en una gran sala; sin maridos, sin esposas, sin matrimonio, nada. Tenían que mendigar para comer, en el pueblo más cercano; con ello alimentaban a su guru y a ellos mismos, fuese suficiente o no. Esto no ocurre en Sahaja Yoga. En Sahaja Yoga todo puede disfrutarse desde el mismo comienzo; se supone que en Sahaja Yoga sois gente absolutamente gozosa. Eso está ahí, pero si no sabéis cómo disfrutar de la colectividad no podéis ascender, porque no hay otra manera. ¿Dónde están las penalidades en Sahaja Yoga? Realmente, para algunos, la colectividad es una penitencia hasta que comienzan a disfrutar de ella. Estas son personas muy problemáticas, critican todo: “Esto no es bueno…” Si están en un ashram criticarán todo: “No me gusta esto. Esto no es bueno. No me gusta aquello”. Ahora, en Sahaja Yoga, con completa conciencia y comprensión debemos hacernos colectivos. Por supuesto si estáis hipnotizados podéis dar todo. Esta es una de las soluciones para nuestra limpieza. Pongamos un ejemplo: Si mis manos están sucias buscaré un grifo; puede que encuentre uno del que sale una gota, no me puedo lavar; voy a otro y no sale nada de agua; voy a otro sitio y no hay ni grifo…, finalmente encuentro un sitio en el que hay agua y entonces me lavo completamente, porque sé que no lo puedo encontrar en ninguna otra parte.

En Sahaja Yoga estáis inmersos en las aguas de la colectividad. Si disfrutáis de esa colectividad y podéis nadar ahí, entonces no hay problema.

Buda, como sabéis, trabaja en nuestro lado derecho, en nuestro Agnya. Es muy sorprendente una deidad como esta que se supone que trabaja en el lado derecho. El dijo para el lado derecho: “Primero tenéis que ser desapegados, no tener deseos”. Aunque sin deseos, sin obtener un resultado, nadie trabajaría normalmente. Pero así es, debéis trabajar sin un deseo puesto en el resultado, solo así puede conquistarse el lado derecho. Una cosa muy simbólica es que, normalmente, la gente del lado derecho es muy delgada, sin embargo, Buda era muy gordo; normalmente la gente del lado derecho es muy seria, no se reirán ni aunque les hagan cosquillas. Pero Buda está riéndose todo el tiempo, con sus dos manos así, disfrutando. Ved el contraste. Solo cuando trabajéis sin ningún deseo, podréis alcanzar ese estado en el que estéis todo el tiempo riendo. Los que sientan que están haciendo algo, con algún deseo puesto ahí, no podrán.

Hay todo tipo de deseos, hay gente de todo tipo, algunos muy bajos, quieren hacer dinero, etc… Pero esto se vuelve más y más sutil, y si no tenéis cuidado os coge desprevenidos cuando surge.

Así que, Buda es el que está en el lado derecho, pero cruza al lado izquierdo. Él es quien dijo que tenéis que ser desapegados en el lado derecho. !Qué contraste! Especialmente aquí, en Occidente, he visto que la gente cae agotada. !Uff! ¿Qué has hecho? “He levantado esta cuchara”. Cogen la cuchara y se sientan. Y se sorprenden de ver cómo yo no estoy cansada. ¡Yo no hago nada! No tengo deseos. Realmente no hago nada, simplemente soy “Niskriya”, ¡no hago nada!

Cuando os volvéis un instrumento, ese instrumento entregado, cuando sabéis que no estáis haciendo nada, sea lo que sea, entonces alcanzáis maestría sobre el lado derecho. ¿Cómo alcanzar esa maestría? Vosotros no hacéis nada. Vais a una tienda y obtenéis una auténtica ganga, sin hacer nada, sin desear nada, de pronto, sin haberlo siquiera sospechado, allí está para que os lo llevéis. Cuando hacéis algo con deseo, hay una reacción; cada acción tiene una reacción. Pero si actuáis sin deseo, entonces no hay reacción, porque no hay deseo puesto en ello. Supongamos que me pierdo en el camino, no me siento contrariada porque puede que tenga que estar allí. Supongamos que tengo que comprar algo…, por ejemplo un castillo. “Tengo”, es diferente de “desear”. La cuestión era que iba a vivir en Italia, debía comprar una casa y me mostraron un castillo, resultó que no era bueno. No importaba, no hubo ningún problema. Pero al segundo castillo que me mostraron, todo el mundo se apegó: “Debes comprar este a cualquier precio…” No me gustaba mucho el lugar pero dije: “Vale, que se cumpla su deseo”. Y ocurrió que todos ellos se quedaron perplejos porque, al final, tuvieron que comprar otro que no querían comprar, yo estaba muy contenta con ello porque nunca deseé nada; y resultó ser el mejor. La razón es “que a mí siempre me ocurre lo mejor” (risas), “así que, cualquier cosa que me sucede sé que es lo mejor”. Todo es para mi bien. Para el bien de Sahaja Yoga. Si alguien critica a Sahaja Yoga, muy bien, excelente. Como en India, al principio había un periódico desde el cual Rajnish solía utilizar a alguien para que hablase contra mí. Era una señora, la cual había robado algunas de mis fotografías y las había entregado también al periódico. Todo el mundo en mi familia estaba furioso: mis hermanos, mi marido, y querían poner una reclamación contra el periódico. Yo les dije que no me gustaba la idea de demandar al periódico ni nada parecido; y resultó que cuando tuvimos el programa público en Delhi, había tantísima gente, que el coche en el que iba, no podía pasar, es decir, estaba todo lleno incluso la parte de afuera. Tuvieron que poner altavoces afuera. Yo pregunté: ¿Cómo es que ha venido tanta gente? Me dijeron: Vimos tu fotografía en el “Semanario Ilustrado”, y nos impresionó tanto…, tanto… Nunca leyeron nada (risas), ni una palabra, y allí estaban todos. Harsh vino por primera vez a este programa y muchos otros estaban allí. Solo por haber visto la fotografía. Conclusión, si ella había robado mi fotografía era para nuestro bien; si hubiéramos querido publicar algo nos hubiera costado mucho dinero y ahí lo tenéis: Todo se hizo sin pagar nada (risas). Y toda mi familia pudo ver cómo este periódico fue cerrado durante seis meses y tuvo muchísimas perdidas. Tampoco deseé esto, claro… (risas). Cuando no tienes deseos siempre estás feliz, porque nada te decepciona, nunca estás nervioso.

Así que, no tener deseos no significa que os convertís en algo absurdo, ascético o algo parecido. Se trata de no “esperar” algo: “Si actúo así ocurrirá esto, si actúo de la otra manera ocurrirá aquello…” No preocuparos. Haced lo que queráis. Una cosa deberíais saber, que nada malo os puede ocurrir. Y si ocurre algo malo es que algo no va bien. Una cosa más os diré. Esta vez, por vez primera, tuve una pequeña caída, no fue nada. Me dijeron: “No puedes salir de casa en absoluto, no te puedes mover porque esta lloviendo y puedes coger artritis”. Yo no puedo coger artritis ni nada que se le parezca, pero no importa. Me obligaron a estar en casa y entonces escribí este libro. Estuvo bien que me cayese, si no, toda mi familia que estaba allí de vacaciones, me hubiera dicho ven aquí y allá… ¡Gracias a Dios! Tuve cuatro a cinco días y escribí este libro. Sacad lo mejor de todas las contrariedades. Si hay una contrariedad, sonreíd ante ella y sabed que es para vuestro bien, para que descubráis algo nuevo o encontréis algo mejor. Pero el condicionamiento es muy fuerte. Por eso es por lo que digo “estad en colectividad”. Por ejemplo, tenemos indios, franceses, etc., cada uno con sus condicionamientos. Los indios, dondequiera que vayan, han de tener comida india para ellos, es una situación muy difícil; en ese aspecto vosotros sois mejores, coméis de todo, incluso la comida india. A mí misma no me gusta demasiado la comida india, no alimenta mucho, es rica en sabor pero no en alimento. Pero a vosotros no os importa comer cualquier tipo de comida. Eso es algo bueno por vuestra parte. Pero vuestros deseos son otros ligeramente diferentes, que ya conocéis muy bien y que no necesito deciros. Por ejemplo, les dije a las mujeres que no llevasen demasiados cosméticos o cosas pesadas a India. Y sin embargo, cada vez los hombres se parten los brazos acarreando sus grandes y pesadas maletas (risas). No estoy diciendo que deban ir por ahí de una manera que no sea decente, sino ajustándose al mínimo.

Siempre hay una competición con el líder; siempre habrá alguien allí. Pero en Occidente algo que está ahí presente no es tanto por la comida, como por la vivienda. Si os casáis con una mujer india (o incluso también una griega), tratará de acaparar al marido para ella. Es algo común que he visto. Con ello estropean el crecimiento del marido y el suyo propio. Es un hecho. Y son muy dominantes. Las indias no son tan dominantes pero tratarán de controlar al marido. Querrán tener otra casa propia. Los indios no saben lo que es colectividad. Son muy individualistas. Por supuesto, ahora con Sahaja Yoga están aprendiendo gradualmente cómo ser uno con los otros. Además, culturalmente, algunas personas son diferentes y se aferran a esas culturas. Por supuesto que si hay algo bueno en una cultura, eso debería mantenerse, porque si hay algo universal en alguna cultura, eso está en Sahaja Yoga.

Pero hay muchas cosas a las que faltamos debido a nuestros condicionamientos. Por eso, al mismo tiempo que Buda hubo otra gran encarnación, Mahavira, el cual apuntó cuáles eran los castigos para la gente que se complace en sus condicionamientos. Ha hablado de cosas horribles. Lo que le ocurrirá a la gente si persiste en sus condicionamientos; donde acabarán; cuál será su situación; qué clase de infierno les espera. Describe todo esto; cosas horribles. Por supuesto, no os voy a hablar de esto hoy. Pero una común a Él y a sus contemporáneos como Buda y Kabir, (no tanto Kabir como Buda) es la creencia de que es incluso mejor no hablar de Dios, sino hablar de lo “abstracto”, de lo “sin forma”. Porque el peor condicionamiento de aquellos días era que cuando empezaban a adorar a una Deidad, se volvían esclavos de Ella. Lo mismo dijo Mahoma, que habló de Nirakara. Pero ambos (Buda y Mahavira) fueron más allá y dijeron: “No existe Dios”, “mejor no hablar de Dios ahora”, “tened primero vuestra Realización”. Yo dije lo mismo en el comienzo: “Tened vuestra Realización”. Porque cualquiera puede venir y decir: “Soy Dios”. Así que, Ellos no hablaron de Dios en absoluto y todo el tiempo dijeron: “No hay Dios, solo vuestro Sí-mismo”. Hicieron algo tabú de la palabra “Dios”. Son llamados “Nirishwaras” los dos, aquellos que no creen en Dios, sino en la realización del Sí-mismo”. Sabían que yo tenía que venir y hablaros de ello.

Buda ha hablado del Buda futuro que es “Matreya”. “Ma” es madre, “con tres formas”, Mahakali, Mahalakshmi y Mahasaraswati. Si a cualquier budista le pides que haga la pregunta sobre “Matreya”, obtiene la Realización en ese momento. Habló de Matreya porque sabía que cuando Matreya viniese, Ella hablaría a la gente de “Ishwara”. Según Ellos, la gente no había alcanzado aún el estado que permitiera hablarles de Ishwara. Así que, dijeron: “No existe Dios”; solo para acentuar la realización del Sí-mismo. “AtmAgnya” conocimiento de uno mismo, realización del Sí-mismo. Y sé con certeza, que los primeros budistas, aunque eran “vishutkas”, ascetas, tenían la experiencia de la brisa fresca del Espíritu Santo. Pienso que igual que los gnósticos. Pero eran muy pocos. No eran tantos como vosotros. Pero la cualidad de su sabiduría era muy elevada, porque todos ellos habían pasado por todas aquellas penalidades. Su sabiduría era muy elevada, y la diferencia entre ellos y el resto de la gente, en cuanto a sabiduría, era tan grande que no pudieron causar impresión en los demás y fueron desapareciendo. Pero todavía tenemos el Zen con Viditama que era otro discípulo de Buda, cuando Buda desapareció, y el Tao. Estas dos manifestaciones son las que expresan los ideales de Buda acerca de Sahaja Yoga. El Tao no es otra cosa que Sahaja Yoga. Tao quiere decir “cómo”, “cómo funciona”. Zen significa dhyana (dhyana: chan: zen: meditación) y también creen en la subida de la Kundalini. Por aquel entonces todavía no golpeaban la espina dorsal de nadie, pero después comenzaron a hacerlo, a golpear la espalda con un palo para ponerlos en meditación (dhyana).

Así que el Tao y el Zen son ramas paralelas del mismo Budismo en el verdadero sentido de la palabra; del ascenso, sin hablar sobre “Ishwara”, sobre Dios, pero la meta era la misma: convertirse en Buda, aunque también desaparecieron poco a poco. Tuve un encuentro con el principal líder del Zen, que vino a mi para curarse y le pregunté: “¿Cómo es que tú eres el líder del Zen si ni siquiera eres un “kashyapa”, un alma realizada?” Él me confesó que solo había habido veintiséis “kashyapas” que comenzaron después del siglo VI (d. C.); que había muy pocos y fueron desapareciendo. Esto quiere decir que sois muy afortunados de ser almas realizadas.

Así que, nuestro árbol “Banyan” es la colectividad. Tenemos que convertirnos en seres más sutiles para ser uno con la colectividad. Esto es algo que se disfruta mucho y es muy hermoso. Aquellos que no pueden hacerlo, no pueden prosperar en Sahaja Yoga, son problemáticos, crean problemas y perturban a todos; su atención es mala y nadie sabe cómo comportarse con ellos.

El mensaje de Buda es, por tanto, no desarrollar el ego. Pero, ¿cómo hacerlo? Primero, ante cualquier cosa que hagáis, tenéis que decir: “Yo no lo estoy haciendo”, “Madre es quién lo hace”, o “Dios está haciéndolo”. “Yo no hago nada”. Pero si sentís que estáis haciendo algo por Sahaja Yoga, es mejor que paréis inmediatamente. Deberíais decir: “No, se me presentó, yo no hice nada, simplemente estaba allí y…” Eso es todo. Entonces habréis alcanzado algo grande.

Segundo, el deseo. Incluso el deseo de…, cualquier cosa, de la cosa más pequeña o más grande, incluso amar a vuestros niños, amar a vuestra esposa, en el sentido de “mi”, “mi”, todas estas cosas, todos estos deseos si no se cumplen os sentís frustrados y, por tanto, debéis saber que algo no encaja, algo no funciona (teniendo esos deseos).

Pero si comprendéis el sentido de la colectividad, podéis ascender muy rápido.

Decía que los indios son, en un sentido, muy religiosos y disciplinados. Pero carecen del sentido de colectividad. Si despertasen a la colectividad, su crecimiento sería muy rápido. El único país que he hallado en este sentido muy bien es Rusia. Son colectivos a causa del comunismo, y también carecen de deseos; porque todos sus deseos estaban satisfechos por las ideas comunistas. No les quedaban muchas opciones y también eran colectivos. En cierto sentido el comunismo ha favorecido al pueblo, no al gobierno. Por el contrario, la democracia ha favorecido al gobierno para hacer dinero, pero el pueblo ha sufrido. Son gente a la que no le ha sido posible conocer la colectividad. Diría que la colectividad se desarrolla mucho más rápidamente en Occidente, sin duda, mucho más rápidamente, pero la ausencia de deseo es menor (o hay más deseos). Es como si alguien tiene los dientes y otro la comida, algo así.

Si podemos vernos a nosotros mismos tal y como somos y tratamos de comprender que o bien tenemos este problema o bien tenemos este otro, y así tratamos de neutralizarlo (que siempre viene de un lado o del otro), entonces tendremos éxito, permaneceríamos en el centro. Porque si resolvéis un problema podéis pasar al siguiente y al siguiente, etc. Simplemente estad en el centro y ved por vosotros mismos el problema, ¿cuáles son mis deseos? Contadlos uno a uno. Si yo tuviera que pensar cuáles son mis deseos me quedaría sin pensamientos, de verdad, mi posición es. Si tuviera que pensar ahora, “¿qué deseo?”, me quedaría sin pensamientos. Algunas veces pienso que si he de desarrollar mi ego no sabría por dónde empezar. Debo tener algo de ego, ¿no?, después de todo, todo el mundo lo tiene, ¿por qué yo no?, (risas). ¡Pero no sé cómo empezar!

Además tenemos estos condicionamientos que desarrollan esa cosa horrible llamada culpa. En tiempos de Buda no tenían este problema, esta es una “técnica” moderna, la de sentirse culpable. Tiene que haber algo de moderno en ello porque yo no sé cómo funciona. Y este modernismo, esta horrible cosa llamada culpa es algo que se ha sumado a las cosas que yo debo limpiar, es algo que no existía en tiempos de Buda, El nunca tuvo esto; de otro modo Él lo hubiera soportado y limpiado por mí. Pero no lo hizo, me dejó a mí el limpiar vuestros Vishuddhis, y el mío me duele constantemente. Esta culpa está sobre todo en la mente occidental, los hindúes no la tienen. Pero esto tiene que ser superado.

Como sabéis entre Buda y Mahavira sostienen el centro “Agnya”. Si queréis tener un Agnya limpio entonces por un lado deberíais carecer de deseos, deberíais perdonar, “Ksham”, Ksham es el “bija mantra” para perdonar; el bija mantra para el lado derecho es: “ksham= Yo perdono”. Y para el lado izquierdo “Ham”, porque la persona del lado izquierdo siempre siente: “¡No estoy bien…!” Y debe decir: “No, estoy bien, Ham”. Estos dos bija mantras Ham y Ksham tenéis que decirlos y actuarán por supuesto, ya que ahora vuestros “pranas” se han convertido en “pranavas”, vuestro aliento es ahora iluminado, un poquito débil quizás, pero no importa. Vuestros mantras pueden actuar. Debéis decir estos dos bija mantras para limpiar vuestros Agnyas. Mahavira tenía la solución para esto: si después de la Realización bloqueáis vuestro Agnya, tendréis un fuerte dolor de cabeza. Este es el estilo de Mahavira. Si hacéis algo malo sufrís un castigo. Sois indulgentes con algo, se os castiga. Vais contra Sahaja Yoga, sufrís un castigo. Yo no hago nada, es Mahavira. Es un trabajo simultáneo. Si tratáis de ser excesivamente inteligentes Él os expone como todo lo contrario.

Estas dos fuerzas trabajan, por tanto, desde el lado izquierdo al derecho y desde el derecho al izquierdo. Si os vais demasiado al lado derecho, el lado izquierdo os golpea fuerte. Si os vais demasiado al lado izquierdo, entonces es el lado derecho el que lo hace. Los dos son realmente como un doble ataque inmediato. Uno nos dice: “No tengas deseos”, que quieres tener deseos, ¡castigado! Como la gente que dice: “Debemos tener un niño, debemos tener un niño”; se les da un niño y entonces: “Madre, ¿por qué se me ha dado un niño tan horrible?” Otros dicen: “Madre, dame una esposa de Maharashtra”. Recientemente hubo un caso así. Alguien estaba todo el tiempo: “Madre, dame una esposa de Maharashtra”. Y vino una de Maharashtra “estilo especial” a castigarlo. Dijo “nunca más de Maharashtra”. Yo nunca había oído hablar de una mujer así en Maharashtra, era realmente horrible. Insistió tanto que la tuvo. Cuando él dijo: “Nunca más de Maharashtra”. Yo le dije: “En Maharashtra son todas excelentes, esta era una excepción para castigarte”. Por eso, con los deseos, si se cruzan ciertos límites, sois castigados, y eso lo hace Mahavira, sea en mayor o menor medida. Como un joven muy jactancioso que vino a Londres. Quería comprarse algo para él y le llevé a una tienda corriente donde había un abrigo muy bonito, de pura lana. No lo quería. “Quiero ir a una tienda grande”. “Muy bien”, dije: “Yo no voy”, le dije a su padre. Volvió de aquella “gran tienda” con un abrigo artificial y sin saber que lo era. Como no quería nada de una tienda corriente, fue a una tienda grande, muy bien, tan grande como el precio que le cobraron y eso es lo que obtuvo.

A cada minuto los sahaja yoguis deben saber que hay un Mahavira allí sentado, observando. También está allí Buda, el cual os indica: “No hagas esto, no desees tanto”, os pone limitaciones; pero si no queréis escuchar, muy bien, Mahavira está allí para corregiros. Él es condescendiente hasta un punto. Luego tenéis dolor de cabeza y me preguntáis: “Madre, ¿por qué tengo dolor de cabeza?”. Vosotros os lo buscáis, es una maquinaria muy automática y por lo tanto, como sahaja yoguis tenemos que ser muy cuidadosos.

La comprensión de hoy debería ser, pues, que todos nosotros tenemos que llegar a ser colectivos desde dentro. No deberíamos discutir ni quejarnos de nada, sino disfrutar de la colectividad.

Pero el segundo aspecto de la colectividad es: “No tratéis de explotar a la colectividad, de lo contrario tendréis problemas”. Como gente que he visto que no sabe usar los cuartos de baño. Cuando sois colectivos tenéis que respetar la colectividad de otros. Bajo ningún concepto debería alguien sufrir debido a vuestra presencia, o sentirse insultado o incomodado. Así que, vuestra permanencia en la colectividad debería ser de tal manera que otra persona disfrutase de vuestra compañía, de vuestro estar allí, debería ser algo donde no hubiese problemas. Pero si estáis pidiendo constantemente, demandando cosas, si os sentís muy importaantes, os sentís con derecho a todo, entonces sabed que no podéis ser colectivos en absoluto y sufriréis por ello, sufriréis por ello automáticamente. Si se comprende y entiende bien esto, vuestro Agnya está a salvo.

Un ejemplo es la ira. La gente suele decir: “Estoy muy enfadado con él”, y lo dice con fuerza y enfadado. Convertid esta ira en perdón y veréis que la persona que os causaba problemas, empieza a tener problemas ella misma. La ira os perturbará a vosotros, mientras que el perdón lo perturbará a él, automáticamente. El perdón es el arma más grande que tenéis, y muestra el carácter de Buda por completo. Esto os dará un autorrespeto y nada os perturbará. Es como un barco, a un barco se le ha de ver firme, cuando se le pone en el océano ha de dar confianza, si no, ¿qué utilidad tiene el barco? ¿Qué utilidad tiene un sahaja yogui que es perturbado a cada momento? Un sahaja yogui debe tener dignidad y si tiene dignidad nada le perturbará: el elefante brama, el perro ladra o no ladra, ¿que más da? El elefante parece no se qué, ¿qué más da?, y si coge agua con la trompa y se la echa encima, muy bien: les bendice con agua, muy bien, seguro que su cabeza se enfría. Esto os dará autoestima y os hará saber lo que sois; veréis que estáis mucho más alto que otra gente. Y esta es la manera de liberaros de vuestro ego, que es un gran problema según vosotros, y siempre me preguntáis: “Madre, ¿cómo librarse del ego?” “E-go” puede convertirse en “vete” (del inglés “I go” – “You go”), (risas). Cuando esta “Yoidad” (I-ness) se va, el Sí-mismo emerge. ¿Por qué sentirse herido? ¿Por qué sentirse mal? ¿Por qué herir a otros? Si os engañan, muy bien, al menos vosotros no habéis engañado a nadie, pero una vez que ya no tenéis ego, quiere decir que estáis entregados y nadie puede engañaros. ¿Podéis entender esto? NADIE puede engañaros, porque hay una fuerza más elevada que se está encargando y cuidando de todo.

Así tendríamos que entender a Buda, éstas son, deberíamos saberlo, nuestras cualidades de Buda; así es cómo puede ser disuelto nuestro ego. Cuando decís: Madre “nos entregamos a Ti”, significa simple y llanamente que concedéis a este horrible ego unas largas vacaciones; significa eso. Así es cómo desaparece este ego.

Creo que ahora, todos vosotros tenéis el Agnya limpio, en mayor o menor grado, y en este estado os reiréis de todo, haréis bromas con vosotros mismos, simplemente disfrutando de todo.

Que Dios os bendiga.