Mahashivaratri Puja

Newcastle (Australia)

Feedback
Share
Upload transcript or translation for this talk

Shivaratri Puja. Glenrock Lagoon, Newcastle, Australia. 29 de febrero de 1992.

Es muy hermoso veros a todos aquí -y a tantos de vosotros de Australia- para adorar a Shiva, a Sadashiva. Creo que esta es una ocasión muy importante porque Sadashiva, el Dios Todopoderoso que es Uno, se expresa en vuestro Corazón como el Espíritu, Shiva.

Tenemos que entender que muchas personas vinieron a esta tierra en diferentes épocas y países; y que hablaron a gente distinta sobre la rectitud, que es el Dharma, sobre cómo crecer. Todos ellos dijeron que tenéis que volver a nacer, es decir, que os tenéis que convertir en el Espíritu. Todos ellos dijeron lo mismo porque sabían que, si la atención no estaba iluminada con la luz del Espíritu, no seríais capaces de entender la espiritualidad.

Dentro de vosotros reside el Espíritu, que está siempre en estado de testigo. ¿Por qué han fallado todas las religiones? Porque no consiguieron dar la Realización del Ser ni se convirtieron en el Espíritu. Así que hay una enorme diferencia entre vosotros y los que profesan algo distinto. Parece que sean hipócritas. Como sabéis, lo intelectualizan, lo explican muy bien, pero podéis ver muy claramente que no han absorbido la espiritualidad. Esa absorción era imposible sin la Realización, esto lo supieron todos. Buda y Mahavira llegaron al extremo de decirle a la gente que se olvidaran de Dios Todopoderoso y que simplemente alcanzaran su Ser, su Realización.

Así que son llamados ateos, “idikshvardi”. No creen en Ishwara. Vieron que la gente solo hablaba de Dios y de lo que los libros decían. Estos libros también hablan de rectitud. Excepto algunos en los que ha habido algún tipo de interferencia, en la mayoría de ellos se habla de espiritualidad y de lo que tenéis que alcanzar, de cuál es el propósito de la religión.

Todo esto está muy bien explicado y muy bien escrito. Os dirán que tenéis que ser así o asá, que esto o aquello no es bueno. Ni siquiera se estableció el primer estado en el que el dharma tenía que asentarse. Esa etapa en la que se supone que las personas no se hacen trampas, en la que tiene que haber justicia, colectividad, amor y comprensión, y no celos ni hipocresía; en la que hay una raza diferente, una comunidad diferente. Tenía que surgir lo que podíamos llamar una civilización diferente.

Todos proclaman que ellos son los elegidos, pero son todos iguales. Los sahaja yoguis han conseguido un gran logro, han alcanzado este estado del Espíritu. Por eso ahora podéis absorber el dharma sin ninguna dificultad. No os gusta engañar ni matar, ni ser violentos con nadie. Os agarráis a la verdad. Muy poca gente puede agarrarse a la verdad. No sois personas que vayan a robar a otros, no tenéis ninguna intención en absoluto. En vuestra mente no tiene cabida la tentación de llevaros nada de otros.

Lo primero y más importante de todo es que tenéis armonía con Dios Todopoderoso. Tenéis respeto hacia Dios. Ese respeto existe, pero no tenéis miedo porque el miedo se ha disipado completamente. Ya no existe el miedo en vosotros pero tenéis respeto hacia Dios, que es Todopoderoso. No engañáis a nadie, no engañáis en Sahaja Yoga por dinero, ni lucháis por poder o por algo material. Toda vuestra atención está dirigida a la expansión de vuestra conciencia en la luz del Espíritu. Esta es la visión de vuestra Madre, porque Shiva es simplemente un testigo. Sadashiva está siendo testigo de todo este juego. No tiene ninguna visión sobre ello pero ahora debe tener muchas esperanzas, después de ver la clase de gente que surge en Sahaja Yoga.

Se ha creado gente única, muy bella, como ángeles maravillosos. Ahora el único problema es que tenéis que mantener vuestras bases angelicales. Pero veo que algunas veces caéis y titubeáis. Eleváis de nuevo vuestra consciencia e intentáis localizar las nuevas dimensiones, que están disponibles para vosotros y que podéis descubrir.

Todo esto es posible porque ahora pertenecéis realmente a la raza de los elegidos. Debéis saber también que sois gente muy especial. Algunas veces los sahaja yoguis no se dan cuenta de ello, no tienen la autoestima de lo que han conseguido. Una vez que obtengáis esa autoestima tendréis la sabiduría para comprender vuestro papel en esta vida. Esta autoestima solo es posible si veis a la gente que está perdida en el lodo del absurdo. Como os he dicho, ahora sois una comunidad especial, sois los que vais a crear una gran comunidad. Cualesquiera que sean los puntos del dharma -o podríamos decir, los aspectos del dharma- podéis impregnarlos de sahaja.

Sahaja tiene un significado muy especial: espontáneamente. No tenéis que hacer esfuerzos, no tenéis que hacer penitencia para que funcione. Podéis conseguirlo de una forma muy sahaja. Sahaja también significa fácil. Podéis tener en vuestro Corazón todas estas cualidades sin ningún tipo de dificultad. Es más fácil para vosotros ser correctos y honestos que ser de cualquier otra manera.

Esta especialidad que habéis conseguido es la visión de todos los santos, de todos los profetas, de todos los visionarios, de todas las encarnaciones. Sois vosotros. Hay charlas y conferencias que da cierta gente en las que se os dice que debéis actuar así, que debéis hacer tal cosa. Creen que por educar a la gente en esos principios esta será correcta, pero no pueden. Si intentáis educarles así, será como meterles un ego en sus cabezas porque se os ha educado únicamente a través de vuestro ego. No es sahaja, no hay un sustento sahaja (dharma sahaja). Es algo que os inculcan desde el exterior. Pero para vosotros es muy fácil absorber todos los aspectos del dharma. No tenéis que hacer nada, vosotros no haréis nada.

He conocido a gente que solía consumir drogas, abusar de la gente, golpearla. Había uno que decía que solía llevar un revolver siempre con él, y ahora se ha convertido en una persona muy tranquila, silenciosa y bella. Es increíble, pero su esposa me dice que él era de esa otra manera. Ahora sois gente especial, y aquellos que no han conseguido su Realización no pueden llegar al dharma fácilmente.

El segundo aspecto, que es muy fácil para vosotros, es amar y preocuparse por otra persona. Es muy fácil, os gusta hacerlo. Os gusta cuidar de otras personas que son sahaja yoguis y también de no sahaja yoguis. Sahaja Yoga es bastante flexible. Si veis a alguien que no es sahaja yogui y está sufriendo, inmediatamente saltaréis para intentar ayudar a esa persona. He visto gente muy interesante en Sahaja Yoga. Un caballero vino a verme y me dijo: “Madre, no tengo dinero, quiero hacer algo por Sahaja Yoga pero no tengo dinero ni siquiera para mi casa. Contesté: “Muy bien, eso está muy bien. Ven mañana, yo te daré el dinero”. Al día siguiente no vino. Yo después le pregunté: “¿Qué pasa?” Me dijo si recordaba a la persona que estaba sentada conmigo cuando se dirigió a mí. Yo le dije que no la recordaba con claridad, que no sabia quién era. “Pues bien, me dijo, cuando salí esa persona me preguntó cuánto dinero quería. Le dije que al menos esto e inmediatamente sacó ese dinero y me lo dio”.

Inmediatamente corremos para ayudar a la persona que no ha conseguido algo en Sahaja Yoga o que no tiene dinero. Os sorprenderá el caso de que seis países como: Rumania, Bulgaria, Rusia, Polonia, Checoslovaquia e incluso Hungría han sido ayudados por un país u otro, también los australianos ayudan a los países de extremo Oriente. Nunca les he dicho nada, nunca se lo he pedido, nunca dije que tenían que ayudar, simplemente dijeron: “Madre, tenemos que ayudarles de alguna forma; lo organizaremos, iremos hasta ellos, lo gestionaremos, lo haremos”. Es sorprendente que solo pensaran en cómo ayudar a esos países.

Cuidaron a los rusos que vinieron a India, les compraron los billetes, los trajeron hasta aquí, los cuidaron. Todo el mundo estaba tremendamente lleno de compasión y amor, pero sin sentir que hubieran hecho algo, sin sentir de ninguna manera que tuvieran alguna obligación hacia alguien. Nadie esperó que se lo agradecieran ni que les escribieran cartas de agradecimiento ni otras cosas. Todo lo que se hizo ya ha terminado, es decir, nadie preguntó nunca cuánto dinero se dio, cuánto se gastó, cuánto tuvimos que dar, nada de eso. En ese preciso momento todo el mundo se presentó, dio el dinero y la cosa funcionó. Es sorprendente.

Por ejemplo, Francia está cuidando de Rumania. Yo no sabía que habían hecho tanto trabajo en ese país. Fui a Hungría y, de repente, encontré ciento veinticinco rumanos allí. Mi Corazón estaba realmente lleno de gozo. Les pregunté: “¿Cómo es que estáis aquí?” “Los franceses lo han organizado todo para nosotros, Madre”. “¿De verdad?” No había ningún francés allí, nadie de Francia. Y los rumanos cantaron tan bien que los indios dijeron: “¡Oh, Ma! ¿Qué es esto? Ha surgido un nuevo grupo”. Todos estos rumanos cantaron sin libros, en ningún momento los usaron. Así que les pregunté: “¿Dónde vais a quedaros por la noche?” “Nos quedaremos en el jardín, Madre, está bien”. “Pero, ¿cómo?” “Nos quedaremos ahí, no importa”.

Ved de qué forma tan sigilosa ayudaron. Si no les hubiera preguntado no habría sabido cómo habían venido. Y todo esto para ayudar a la gente que no tiene, es decir, a aquellos que son más pobres que nosotros. También he visto a gente que, individualmente, cuidan de otros y traen cosas para sus amigos, regalos y cosas bonitas, simplemente para su propia satisfacción, no para que nadie se lo agradezca ni para que más tarde digan: “¡Oh, te he traído este sari!” Para nada, solo para ver a otra sahaja yoguini con ese sari. Es algo muy hermoso.

Imaginad a esos países como Inglaterra, Francia, España, Italia, Suiza, muy agresivos, con gente muy agresiva; cuando salieron no fue para ayudar a nadie sino para establecer su imperio, para destruir a gente, para convertirlos o para hacer cualquier cosa en nombre de la religión, en el nombre de Dios. Sin embargo, vosotros vais a otros países y solo queréis ayudar, prestarles toda la ayuda necesaria. Yo misma estoy asombrada de cómo funciona tan espontáneamente en vuestro corazón, que debéis hacer esto y tenéis que hacerlo funcionar. Esta transformación que ha tenido lugar en vuestro interior ha sacado a la luz toda la belleza de vuestro corazón, de vuestra compasión y de vuestro amor. Y dais y queréis dar seguridad a otros sin esperar nada, sin pedir nada a cambio, y todos disfrutáis de ser así. Viviendo en un lugar tan sencillo como éste, bajo una tienda, sentados, escuchándome, no queréis ninguna comodidad, solo buscáis la comodidad de vuestro Espíritu y disfrutar de todo este lugar, de la naturaleza.

He visto que, gradualmente, los sahaja yoguis se están haciendo extremadamente conscientes del problema ecológico en todo el mundo. Han comenzado a usar cosas que son naturales, artísticas. Es muy sorprendente que, de repente, se hayan inclinado por lo artístico. Conozco a un señor que tenía armas, municiones y cosas así en su casa, y que ahora tiene hermosos objetos. Por supuesto, las armas y las municiones están en un lado, pero ha hecho una colección de bellos objetos artísticos. Así que, le pregunté: “¿Cómo los has conseguido?” Respondió: “Madre, pensé que te gustaría verlos y que te sentirías feliz, así que los he comprado para que los veas y si quieres puedes llevarte lo que quieras”. Yo le dije que no quería nada y que se los podía quedar.

Esta generosidad es señal de una encarnación pero ahora está entre mis propios niños, que son extremadamente generosos y disfrutan más dando cosas a los demás que quedándoselas para ellos. Ha ocurrido no solo en Australia sino en todo el mundo. Si veis a los sahaja yoguis ahora, están sacrificando su tiempo, su dinero, todo, para extender Sahaja Yoga, para ayudar a otros y para acomodar todo y a todos en su interior.

Esa sabiduría colectiva está ahí. No hay que llegar a ningún consenso. No tenemos que decir que todos debemos decir esto ni cuál es nuestra opinión, ni que votamos por ello. Todos votamos lo mismo. Si alguien dice en Italia “muy bien, tenemos que prestar ayuda -por ejemplo, a Bulgaria- inmediatamente todos los italianos sacan sus ornamentos, todo”. Como en aquella ocasión que dijeron: “Madre, ¿cuánto deberíamos hacer?” Yo les dije: “Es vuestro asunto”. Y los búlgaros estaban tan sorprendidos que decían: “¿Qué hemos hecho por estos italianos que han hecho un viaje tan largo para ayudarnos, económicamente y con todo lo demás?”

Por tanto, como esta compasión, este amor, este sentimiento de unidad son parte de nosotros, no estamos separados. Os sorprenderá saber que enviaron una televisión a Rusia desde América. América no tiene nada que ver con Rusia, pero debe ser el espíritu de Shri Krishna intentando ayudar al espíritu del Agnya derecho, debe ser eso. Es increíble ese entusiasmo con Rusia. Venían en autobuses, en trenes, iban a todas partes, a sitios muy lejanos, y han conseguido unos resultados impresionantes.

No solo en Europa están haciéndolo funcionar en los alrededores de sus ciudades; están trabajando por todas partes: en Turquía, en Nepal y ahora alguien ha ido a Japón. De hecho, no es japonés, es de Río y ha ido a Japón. Es físico, pero está haciendo un número de pantomima en las calles para atraer a la gente y hablarles de Sahaja Yoga. Me ha telefoneado tres o cuatro veces. “Madre, has estado en Australia tantas veces, ¿por qué no vienes a Japón esta vez?” Le dije: “De acuerdo, definitivamente la próxima vez iré a Japón”. Se lo prometí, pero esta vez ya tengo el programa preparado por los sahaja yoguis, como sabéis, y no puedo hacer nada. Me han organizado ya todo y no me importa porque es tan sahaja, para mí es sahaja. Mucha gente me dice: “Madre, estás viajando mucho”. Pero nunca pienso en ello.

La colectividad que tenéis ahora es muy grande. No solo tenéis esa colectividad en Australia; el otro día telefoneé a alguien en India y les dije que iba a comprar un ashram en Brisbane. Contestaron: “Madre, eso es muy grande y estamos muy contentos”. ¿Qué motivo hay para que un indio esté contento porque compremos un ashram en Brisbane? Y sin embargo, estaban muy entusiasmados por ello. Para ellos Brisbane es lo mismo que Bombay o Delhi.

El Corazón se ha hecho muy grande porque Shiva está brillando en él, el Espíritu está brillando. Se ha hecho un Corazón tan grande que abarca todo el Universo. Yo creo que es la forma en que la gente mira, por eso todos vosotros os habéis convertido en gente universal. No solo leéis sobre Vishwa Nirmala Dharma o sabéis de ello a través de vuestra mente; no solo tratáis de seguirlo sino que lo habéis absorbido en vuestro Ser, lo cual es muy sahaja. Además no os habéis dado cuenta de cómo ha llegado a vosotros de una forma tan sahaja.

Sabéis que, hace tiempo, Australia estuvo llena de racismo. Hace unos años nadie podía venir, no se permitía a nadie venir aquí. Pero hoy se ha producido un gran cambio en Australia. Aunque se habló de cristianismo y todas esas cosas no pensaban en lo que Cristo había dicho; eran simplemente lo contrario de lo que Cristo dijo.

Islam es lo mismo. El Islam habla de cosas muy grandes, pero hay que confesar que los musulmanes no tienen nada que ver con el Islam. Es únicamente fachada. Si miráis la cristiandad tendréis una idea muy, muy extraña sobre ella. Si le preguntáis a un hombre hindú acerca de la cristiandad os dirá que son la peor gente que existe, muy astuta, muy agresiva y que no necesitan nada de tiempo para matarse unos a otros. Imaginaos, discípulos de Cristo. Pero si le preguntáis a un cristiano acerca de los musulmanes os dirá: “¡Oh! Estos musulmanes son los más pendencieros, la gente más sucia que haya nacido, fundamentalistas. Todos ellos son fundamentalistas, tanto si son hindúes, como cristianos o musulmanes; todos son fundamentalistas porque leen un libro y solo lo leen. El libro por sí solo no funciona. Si el libro entrara en su interior, comprenderían que todos estos libros están diciendo la misma cosa bajo diferentes nombres, eso es todo.

Pero el hecho universal que habéis conseguido, gracias a vuestro Espíritu, estaba allí prácticamente intacto y ha comenzado a brillar dentro de vosotros. Por eso tenemos ahora una nueva comunidad, una nueva civilización de personas extremadamente honestas consigo mismas y honestas entre sí. Son personas extremadamente correctas y buenas, están totalmente en contra de la violencia, son cumplidoras de las leyes, muy amorosas, cariñosas, al mismo tiempo extremadamente constructivas y a la vez muy inteligentes. Entienden Sahaja Yoga, que es un tema muy sutil. Sahaja Yoga es un tema tan sutil porque sabéis que todo el mundo ha fallado en hacer comprender a la gente cualquier cosa acerca de la verdad. Era una situación imposible, pero este era el truco, vuestro Espíritu. Una vez que vuestro Espíritu está iluminado, entra en vuestra cabeza sin ninguna dificultad, de una manera absolutamente sahaja. No sabéis lo difícil que es este aspecto de Sahaja Yoga.

Es el cumplimiento del deseo del Divino que vuestra divinidad se esté expresando a sí misma. Cuando sois colectivos, disfrutáis más los unos de los otros, os encanta la vida colectiva. El individualismo está en contra del Espíritu del Todo, pero tenemos nuestras propias diferencias. Debido a la forma en que se vive en cada país, en otras atmósferas, con otras tradiciones, así es como estáis viviendo.

Sin embargo, entre nosotros tenemos la misma fe, una fe que está iluminada, que no es una fe ciega, sino una fe iluminada. Primero, sois almas realizadas; segundo, hay un Poder Omnipresente. Adoramos de la misma manera, tanto si es a Cristo como a Mahoma o a Shiva. Todos adoramos de la misma forma, no tenemos ninguna diferencia de opinión sobre ello. No es como una iglesia que se convierte en diez iglesias o un hinduismo que se convierte en diez hinduismos distintos. Todos somos sahaja yoguis y todos tenemos los mismos principios que nos ligan de una forma sahaja. No tenemos que decir: “¡Oh! Hemos de tener principios, tenemos que cumplir este principio, somos sahaja yoguis”. Tenéis que estar ahí totalmente, porque debéis estar ahí. No lo podéis evitar porque ahora el Espíritu está brillando en vuestra naturaleza.

También os estáis convirtiendo en arquetipos -en el sentido real de la palabra, diría yo- para la gente que no es sahaja. Tales personas no están disponibles en todas partes. Cuando la gente os vea, pensará: “Son un modelo de vida. No beben, no fuman, no alardean de ello, no odian a nadie, aman a todos. Son muy dinámicos, creativos, constructivos, y tan felices consigo mismos. No son para nada competitivos, no causan problemas a la naturaleza, a nada, se han convertido en gente muy hermosa. ¿Quiénes son estas personas?” Estas personas tan hermosas son los modelos.

Por tanto, individualmente, tenéis que comprender esta parte: que tenemos que ser modelos en este país, Australia. Modelos de buen comportamiento, de buen lenguaje, de una vida decente, decorosa, sin peleas con el marido o con la mujer. Ya veis que encendéis cualquier televisión y se os pone dolor de cabeza, quiero decir que no hay otra cosa que maridos peleando con sus mujeres o mujeres peleando con sus maridos.

Deberíais tener sabiduría sobre esto, sobre las peleas entre vosotros. Veis lo que sucede si se junta mucha gente en un bar; que ese bar estallará. Nunca pueden sentarse en silencio. Me sorprendió que el alcalde de Cabella me dijera: “En la iglesia se sientan y a la media hora empiezan a darse codazos unos a otros y a decir: “¿Cuánto va a durar?, mejor salir, estamos cansados”. Y sin embargo, ¿qué hacen todas estas personas tantas horas contigo? ¿Cómo están tan hechizados? No se sienten cansados, creo que son gente especial”. Le dije que sí, que lo eran. “¿Y qué hacen?” “Ellos no hacen nada, simplemente disfrutan”.

En una ocasión que celebrábamos un Puja, el Guru Puja, no entendía cómo pudimos estar durante unas seis horas todos juntos, y toda la gente del pueblo estaba sorprendida de que estuviéramos todo el tiempo sentados. Todos ellos, la mayoría gente mayor, pensaban que estos ángeles habían venido de algún lugar, que eran gente angelical, que no me causaban problemas ni me torturaban, sino que me cuidaban, intentaban ser amables conmigo y no solo eso, también intentaban traerme gozo.

Estaban muy sorprendidos en ese pueblo. Primero solían llamarme Princesa; luego comenzaron a llamarme Diosa; después dijeron: “Tú eres la Madonna”. Me empezaron a decir todo lo bueno que se les ocurría. Ahora quieren venir a Sahaja Yoga, pero les he dicho que ya veremos, que dentro de un tiempo también lo haremos funcionar para ellos. Están ahora tan contentos de ver cómo son los sahaja yoguis -porque yo raramente salgo para ver cómo son los sahaja yoguis- que la tierra detrás de la casa no se la dieron al Príncipe Doric -que estaba decidido a pagar un montón de dinero por ella, porque quería hacer una carretera- sino que corrieron y me dieron la tierra a un precio nominal. Dijeron: “¡Es para Ti! ¡Por favor, acéptala!”

El pueblo completo se está transformando. Pero la dedicación que tenéis es muy destacable, me sorprende, realmente me sorprende. Nunca os he enseñado mucho salvo la forma en que os debéis dedicar a todo. Cualquiera que no sea un sahaja yogui estará encantado de la forma en que os dedicáis a Sahaja Yoga, a mí. Algunas veces pienso: “¿Qué es lo que he hecho? ¡Yo no he hecho nada!” Tenéis vuestra Kundalini y vuestro Espíritu, eso es todo; pero esa diferencia la habéis cubierto con una cierta distancia. ¿Podéis imaginar a una mujer india viniendo a Australia y encontrando este amor, este afecto y esta dedicación? ¡Es increíble! Todos creen que os debo estar hipnotizando. Nadie puede creer que tengáis esta dedicación, que aceptéis tantas dificultades, que os preocupéis tanto. Quiero decir, imaginad simplemente las flores que habéis comprado; solo imaginad todo lo que habéis hecho, la forma en que trajeron otro coche grande para que vuestra Madre pudiera venir aquí sin ninguna dificultad.

Todo este amor, todo este afecto, este cuidado… nunca he pedido nada. Podría haber caminado; si me hubierais dicho que teníamos que caminar, habría caminado, nunca habría dicho que no. Nunca esperé nada de todo esto, pero la forma en que queréis expresar vuestro amor hacia mí, esta dedicación es demasiado, y os sacrificáis mucho por ello. De verdad, os estáis sacrificando mucho -con vuestro tiempo y vuestro esfuerzo- para hacer un viaje tan largo y llegar a este lugar tan lejano para este Puja.

Toda la ganancia que obtenéis del Puja es únicamente posible cuando sois un espíritu realizado, de lo contrario es inútil hacer ningún Puja, ninguna adoración. La gente va a la iglesia, canta algunos himnos y se vuelve a casa. Están exactamente igual y más tarde van al bar porque piensan que es el único lugar donde se puede obtener algún gozo por el que uno tiene que esforzarse y sacrificarse, aunque tengo que decir que Sahaja Yoga es lo más fácil. No tenéis que ir a los Himalayas ni poneros sobre vuestras cabezas ni nada de eso, pero todavía tenéis que sacrificar vuestro tiempo, vuestra atención.

Anteriormente podríais haber ido a conciertos de música rock, incluso a algún bar, podríais haber estado disfrutando de todas estas cosas, pero lo habéis dejado todo sin que yo os lo haya tenido que decir. Habéis abandonado todo y ahora sois muy puros. Vuestra atención es tan pura que no podéis disfrutar de nada de eso. No creéis que sea muy extraordinario que haya ocurrido todo esto. Yo no os tengo que decir nada, no os tengo que enseñar; debo decir que vosotros solos habéis abandonado todas estas cosas. De repente me doy cuenta de que todos vosotros os habéis vuelto muy limpios, muy hermosos; vuestros chakras están muy limpios. Son vuestros pasados punyas que están funcionando. Pero aún os debo decir que debéis conocer vuestra autoestima, que sois sahaja yoguis y que no podéis comportaros de esa manera si sois sahaja yoguis. Ahora sois sahaja yoguis, de forma que esa dignidad, esa sabiduría, tienen que estar ahí, al igual que la compasión, el amor y la unidad de propósito. Por todo el mundo tenéis hermanos y hermanas; esta hermandad está en todas partes. Tenéis hermanas raki, tenéis relaciones muy puras. Cualquier cosa impura es lanzada fuera de una forma sahaja; aquellos que no encajan son expulsados fuera.

Ahora tenemos unas familias muy hermosas, niños muy hermosos; simplemente pensad en ello. Moisés salvó a algunos judíos pero, ¿para qué sirven? Para nada. ¿Cuál es la utilidad de salvar a esas personas? Entonces vino Cristo y habló, y esto es lo que le ha pasado a la Cristiandad. Mahoma vino y habló de cosas muy hermosas, os lo debo decir. Nunca hizo una religión rígida, nunca. Fue muy flexible y dijo que debíais conseguir el conocimiento. Según ellos el conocimiento era leer el libro, interpretarlo y ser intelectual.

Después también vino Gurú Nanak, vosotros ya lo sabéis. ¿Qué les ha ocurrido a los sikhs? ¿Dónde están ahora? Sikh significa una persona que ha aprendido las leyes divinas. Si les digo que tienen que seguir las leyes divinas, ¿cómo lo van a hacer? No están conectados, no saben qué son estas leyes divinas. Simplemente seguidlas, queremos que sigan estas leyes divinas. Ahora están por ahí, en algún lugar de esta tierra. Las leyes divinas están funcionando ahí. Pero, ¿cómo van a hacer funcionar esas leyes divinas si no están conectados?

Sin embargo, vosotros sabéis inmediatamente cuáles son las leyes divinas. En cuanto vais en contra de ellas, lo sabéis, porque podéis sentirlas en vuestro sistema nervioso central. Podéis sentir en vuestras manos que estáis haciendo algo en contra de esas leyes divinas. Lo sabéis de inmediato y, si estáis alerta, intentaréis cambiarlo inmediatamente. Pensaréis: “Eso no está bien, esta es la verdad de mí mismo”. Empezáis a juzgaros a vosotros mismos todo el tiempo y queréis corregiros, porque no os gusta estar así.

Tenéis tantas ideas acerca de vuestra vida personal que creéis que deberíais tener una mujer o un marido que os mime, que vuestro hijo debería ser de esta manera. Ahora todo esto ha terminado. ¿Qué queréis? “Quiero una verdadera sahaja yoguini; quiero un verdadero sahaja yogui para casarme con él”. Después de esto, el matrimonio se convierte en una bendición. ¿Cómo? Igual que se han abierto estas flores. Toda esta belleza está innatamente construida dentro de vosotros. Ya la empezáis a mostrar, pero tiene que florecer, tiene que salir.

Esta así llamada penitencia no es tal para vosotros. Dicen que estamos disfrutando de este lugar, quiero decir, que es un lugar de penitencia solo por la forma en que las cosas están aquí. No hay ni siquiera baños cerrados, la gente encuentra incluso muy difícil darse un baño. Es una penitencia venir a un lugar tan remoto o viajar por Maharastra, es otra gran penitencia.

Pero vosotros disfrutáis de esto. Por ejemplo, en una ocasión no llegabais. Dijeron que íbamos a perder nuestros autobuses. Dije: “¿De verdad?” Pensé que estaríais felices. “¡No, no Madre, nos perdimos!” Quiero decir que era una aventura para ellos, les gustaba la forma en que les daban empujones o les daba hipo. Estaban muy contentos por cómo estaba todo, era como una aventura. Todo lo que llamamos tapasya o penitencia se convertía en una aventura, y es muy interesante la forma en que ellos lo describen.

Como esos músicos que fueron a Rusia y se perdieron, y cuando aparecieron describieron todo lo que les había pasado como si Dios los hubiera llevado de un lugar a otro. Cómo les ayudaron en todo momento; cómo, de repente, llegaron a Italia y cómo llegaron a Milán, al ashram. La descripción completa es extraordinaria. Ahora pensad en lo que habéis conseguido, pero no podéis ni siquiera pensar, simplemente lo conseguís. Sin pensar conseguís cosas; es la bendición del Espíritu, la bendición de Shiva. El Espíritu es el testigo y desarrolláis ese estado de testigo. Para vosotros todo esto os parece un divertido escenario donde la gente se mueve inmersa en temas políticos o económicos.

Fui a Rusia. Es un país muy grande. Les dije que los políticos se estaban comportando de una forma muy fea y que ahora estabais teniendo problemas con la comida. “¡No, Madre!, no tenemos problemas con la comida ni con nada, porque cuidamos de tener la comida espiritual. Dejemos que esas personas se peleen, que hagan lo que quieran, no nos preocupa”. No estaban nada preocupados. No les importaba que pudiera haber un golpe de estado o algo así. “Dejémosles pelear, dejémosles hacer lo que quieran, nosotros estamos en una situación muy diferente”. Les pregunté: “¿En qué situación estáis?” “¡Estamos en el Reino de Dios!”, me dijeron. “Estamos en el Reino de Dios, ¿por qué deberíamos preocuparnos por estos reinos o por estas cosas? Dejemos que se peleen”. Tenéis muchos hermanos y hermanas allí y son unas personas muy hermosas y satisfechas. Yo me levanté temprano por la mañana y ellos, no sé cómo, habían plantado flores en el camino hacia mi casa. Había flores por el camino, filas y filas. No sé cuándo vinieron, cuándo lo hicieron ni cómo desaparecieron. Os digo que fue algo tan dulce que os haría llorar de gozo, no sabía qué decir. Si esto sucede en todas partes, imaginad qué mundo podemos tener.

Por supuesto, hay algunas personas que son la excepción, que son problemáticas, que no están bien en absoluto. Está bien, olvidaos de ellos. Porque ahora sois vosotros la gente que ha comprendido quién es Dios, quién es Sadashiva. Ahora tenéis fe en Él, que no está ciego. También sabéis que sus poderes y sus leyes funcionan; todas las restantes leyes son inútiles, únicamente sus leyes funcionan. Habéis visto y experimentado en vuestra vida cómo se producen los milagros, cómo están funcionando las cosas.

Yo diría que un milagro sencillo era el deseo de que el Puja de Shiva se hiciera en un lugar rodeado de colinas, pero no lo pudieron organizar. Intentaron en otros lugares, pero no lo consiguieron. Por eso estáis aquí. Vosotros deseáis y funciona, como si vuestro deseo actuara, pero todavía hay algunas personas mediocres que se están comportando de una manera mediocre, muy tonta. Algunos de ellos son muy tontos. No comprenden lo que es sahaja, no entienden todo lo que pueden conseguir. Por tanto no os debéis preocupar por ellos. Os tenéis que preocupar por toda la colectividad, que es buena, y olvidaros del par de personas que son inútiles. Si ascienden, bien, pero si no ascienden no vamos a forzarlas.

Conseguiremos que vengan más y más personas; estoy segura de que será así. Pero lo más grande que habéis conseguido es la completa integración con vuestro Ser, vuestro corazón, vuestra mente, vuestro hígado, vuestra atención; todos están integrados. No hay pelea, no hay lucha entre vuestro corazón y vuestra mente, entre vuestro corazón y vuestro cerebro. Cualquier cosa que vuestro cerebro piensa, vuestro corazón lo acepta; cualquier cosa que vuestro corazón desea, vuestro cerebro lo acepta; dondequiera que esté vuestra atención, está completamente integrada con vuestro corazón y vuestro cerebro.

Debéis observar a los demás. Quizá no quieran hacer algo, pero lo tienen que hacer porque están acostumbrados. Mucha gente me ha dicho que quiere dejar determinada cosa, pero que no puede. Una vez que habéis conseguido el Espíritu, tenéis el poder de superar todas las tentaciones y no solo eso, sino también las diferenciaciones que siempre habéis hecho. Esto es así, esto es asá, pero ahora lo integráis, os integráis entre vosotros, entre diferentes estados y diferentes países. Parece que todo el Cosmos se ha integrado, está entrelazado y gobernado por las leyes divinas.

Esta integración os da una comprensión completa de Sahaja Yoga desde un punto de vista mental, emocional y espiritual. No es un lavado de cerebro o un bombardeo, sino que simplemente, a través de la Luz del Espíritu, habéis visto la Verdad y la habéis comprendido. También tenéis muchos poderes que no queréis ejercer, eso es una cuestión diferente, pero intentadlo. Una sola palabra de una oración vuestra es más poderosa que cientos de oraciones de estas personas. Una petición es mucho más poderosa que miles de esas peticiones.

Nunca lo habéis intentado. Intentadlo. Sois extremadamente poderosos. Cualquier cosa que deseéis funciona. Tenéis otros poderes, como dar la Realización o curar. Tenéis muchos poderes, pero en la mayoría de las ocasiones me traéis a la gente para que los cure. No, no es necesario. Se os han dado todos los poderes, los tenéis todos, usadlos. No tengáis miedo, usad estos poderes y os asombraréis de cómo funcionan y de cómo os sumergís más y más en vuestra fe, en vuestro Ser.

Por supuesto que hay sahaja yoguis que están hechos para sentarse en el trono, pero todavía están pidiendo limosna. ¿Qué podéis hacer al respecto? Sois muy poderosos colectiva y también individualmente. Cualquier cosa que deseéis, la podéis tener. Yo no tengo deseos porque el Divino, el Poder divino, está trabajando para mí en todo. No tengo que desear, lo sabe. Yo no deseo nada, pero vosotros tenéis que desear, rezar y pedir. Y cuanto más abiertos estéis, vuestras oraciones abarcarán más y más de un mundo más amplio. Tendréis una visión más amplia, no limitada a vuestros hijos ni a vuestra familia ni a un lugar determinado, sino ilimitada.

Así nos hacemos muy conscientes y alertas acerca de todo lo que está pasando en el mundo, para poner nuestra atención ahí. Intentamos averiguar lo que va mal aquí y allá. No estáis solo preocupados por un pequeño ashram, sino que nos preocupamos por todo el mundo para saber qué es lo que va mal, lo que podemos hacer, lo que podemos desear; porque si tenemos el poder y podemos poner en marcha el Poder divino, entonces, ¿por qué no hacerlo funcionar nosotros mismos? Podemos hacerlo. Por lo tanto, vuestra atención puede ir a cualquier lugar; puede ir a Nicaragua, a Israel, a Sadam Hussein, puede ir a cualquier lugar donde queráis que funcione. Se mueve, es móvil, es universal. Comenzad expandiendo vuestro corazón, vuestra mente y vuestra atención. Debo decir que vuestra fe en mí es enorme. Yo misma estoy sorprendida de ello.

Yo estoy bastante camuflada. No es fácil comprenderme, yo no me entiendo a mí misma. Por un lado, por supuesto, soy Divina, sin duda; por otro lado soy muy humana, incluso si veo a alguien sufriendo en una película empiezo a llorar, no lo puedo soportar. No puedo curar niños porque no puedo soportar sus sufrimientos. Es otro aspecto de mí. Me he hecho a mí misma extremadamente humana y mi Divinidad también es sahaja. No he hecho nada. He sido así y soy así, yo no he conseguido nada. Si he conseguido algo es la comprensión de los seres humanos, porque siempre sentí que todas estas encarnaciones y todos estos profetas nunca entendieron a los seres humanos, nunca supieron que no eran personas iluminadas y que no tenía sentido hablarles de todas esas grandes cosas. Todo era una pérdida de tiempo. Es como si a una persona ciega le explican todos los colores y la belleza del escenario.

Y así, esta realización humana que yo tenía que conseguir resulta muy hermosa. Ahora comprendo lo que es el gozo de Bhakti, el gozo de Gnyana, cuál es el gozo de Karma, porque una persona que no hace nada, que es Nishkriya, una persona que no tiene Bhakti y no tiene Gnyana, es despertada completamente. Tuve que llenarme de todas estas cosas que yo tenía que conocer. El Gnyana, no el Gnyana del Divino, porque después de todo eso no es difícil, ya que si yo soy eso, lo conozco, sino el Gnyana de los seres humanos, los problemas de los seres humanos. Durante años tuve que estudiar a los seres humanos para que todo funcionara.

Pero una vez que ha funcionado, la Divinidad ha comenzado a expresarse en vosotros, y esas luces divinas están sentadas delante de mí. Os bendigo a todos desde mi Corazón donde reside Shiva, Sadashiva, y Él os bendice. Él es una personalidad absolutamente inocente. Es aquel que está totalmente más allá de cualquier apego; es aquel que está mirando, aquel que os está mirando a todos vosotros con tal admiración que su gozo no conoce límites; es tremendo, como si estuviera bailando de gozo.

Es un gran día para nosotros por celebrar este Shiva Puja aquí. Espero que todos respetéis el principio de Shiva en vuestro interior, es lo más importante, y que cuidéis las vibraciones que laten en vuestro Ser, porque el Espíritu ha despertado en vuestra atención, en vuestro sistema nervioso central. Esto es lo más importante que tenéis que hacer, el resto es sahaja, absolutamente sahaja.
Que Dios os bendiga.