Diwali Puja

(Portugal)

Feedback
Share
Upload transcript or translation for this talk

Diwali Puja. Sintra, Portugal. 10 de noviembre de 1996.

Hoy vamos a adorar a Mahalakshmi. En este país se la venera mucho como María. Hay un swayambú de María, que habréis visto, y se dice que hubo una aparición. Al principio no lo creí, pero después de sentir las vibraciones vi que era verdad, que realmente tuvo lugar una aparición de María. También habréis visto aquella fotografía en la que ella aparece frente a mí.

Este es el Principio [de Mahalakshmi] por el que habéis llegado a este estado. El camino central de vuestro ascenso lo crea el Poder de Mahalakshmi con el fin de que la Kundalini ascienda a través de él. En el templo de Mahalakshmi, en Kolapur, siempre cantan la canción de UDE UDE AMBE. Y pregunté a la gente de por allí por qué cantaban la canción de Ambe (Kundalini) en el templo de Mahalakshmi. Me contestaron : “No lo sabemos, ¿es un error?” Les dije: “No, porque la Kundalini solo puede ascender en el canal de Mahalakshmi y la Kundalini es Amba”. Lo comprendieron muy bien y estaban sorprendidos de mi observación, pues esta canción se ha cantado allí desde tiempos muy remotos, y nunca supieron porqué.

Respecto al Principio de Mahalakshmi debemos entender algo, y es que los canales o poderes de Mahalakshmi han creado en nosotros un equilibrio adecuado, un camino adecuado para que la Kundalini ascienda. Los canales izquierdo y derecho se equilibran, y Ella crea y agranda el camino por donde la Kundalini ha de ascender. Este camino o canal se crea a través del Amor y la Compasión, y Ella sabe que si el camino no es lo suficientemente ancho o amplio, la Kundalini no puede ascender.

Finalmente uno alcanza un estado en el que comienza a buscar la Verdad; es entonces cuando el Principio de Mahalakshmi despierta, y a veces tiene tanta fuerza que buscáis la Verdad de una forma frenética. Siento mucho decir que ya hay muchas personas que se han perdido en la “búsqueda”. Aunque también hay muchas otras que han llegado al camino adecuado, a su ascenso.

Otra cualidad del Principio de Mahalakshmi es que permite al Poder de la Kundalini actuar en diferentes chakras, abrirse camino hacia los chakras y limpiarlos. Es una fuerza muy flexible, que guía a la Kundalini hacia los chakras y sabe perfectamente qué chakras necesitan la ayuda de la Kundalini.

Habréis visto cómo la Kundalini, cuando asciende, genera pulsaciones y muestra dónde se necesita actuar. Todo esto funciona porque Mahalakshmi es todo Amor y Compasión y desea que alcancéis la Verdad Absoluta.

Sabéis que en Sahaja Yoga tenemos muchos problemas porque las personas aún llevan consigo en su ascenso algunas de las “piedras” del pasado y por eso no pueden avanzar. Lo intentan y se caen, vuelven a intentarlo y se caen de nuevo. Pero hoy os voy a hablar del estado que debéis alcanzar . De ello habló Krishna en el Gita; en el 2º capítulo se describe el estado de testigo, “Sitta PrAgnya”, aunque Él no es tan claro como lo es vuestra Madre, por eso la gente no lo entiende y pregunta cómo se llega al estado de Sitta PrAgnya. Ganeshwara, cuando escribió su Ganeshwari lo llamó “Sahaja Sthiti”, esto es, “estado sahaja”. No lo llamó “Sitta PrAgnya” sino “estado sahaja”. Lo describe de una manera hermosa y sutil, aunque creo que muy pocas personas entendieron a Ganeshwara.

Una persona que alcanza ese estado es como un espejo donde se reflejan muchas caras. Muchos se miran en ese espejo, muchos se arreglan o retocan frente a ese espejo, pero el espejo no varía en absoluto. Por tanto, a la persona que es “Sitta PrAgnya”, o sahaja, no le importa lo más mínimo lo que tenga enfrente, quién tenga enfrente o dónde se encuentre. Permanece dentro de sí misma, es soporte de sí misma. Como el Sol, que juega con sus diferentes rayos, pero no se pierden, sino que retornan a él. De la misma manera, todos los sentidos que tenemos juegan alrededor nuestro; pero a una persona sahaja no le importa, no se implica, los sentidos juegan alrededor y después retornan al interior. Este es el estado que debéis alcanzar, entonces seréis sahaja yoguis. Sin embargo, veo que la gente todavía se pierde en cosas como sacar dinero de Sahaja Yoga, ser o no líder, celos, envidia… Esto significa que todavía se ha de hacer un gran trabajo en nuestro interior. Pero, en realidad, no se ha de hacer ningún trabajo como tal si sois capaces de entregarlo todo, de rendirlo. Por eso insisto en que meditéis, porque cuando meditáis, todas las cosas que detienen vuestro ascenso desaparecen; gradualmente desaparecen porque os convertís en vuestro Ser, permanecéis en vuestro Ser, en vuestro interior, vosotros mismos sois vuestro soporte. Y nunca os sentís aburridos, yo nunca me aburro; no sé lo que significa la palabra aburrimiento. Tanto si estoy con vosotros, como sola, nunca me aburro. Si uno no se implica con nada, ¿cómo va a aburrirse?

Otra cuestión es que ascendéis por encima de cosas como la avaricia. La gente que es avariciosa está muy ocupada sacando dinero de aquí y de allá. La gente que aún está llena de lujuria todavía anda organizando cosas para satisfacer estos deseos. Pero en el “Sahaja Sthiti” (estado Sahaja) simplemente observáis, sois el testigo. No os perdéis en nada que os haga descender. Para vosotros este estado no es nada difícil de alcanzar, porque habéis cruzado vuestra mente, estáis más allá. Y todas estas cosas os vienen a través de vuestra mente. Ya os he dicho que la mente es un mito, debéis aceptarlo.

Esta mente no deja de daros ideas. Algunas personas dicen: “¡Sí, Madre!, pero…, pero…”. Este “pero” viene de vuestra mente. Vuestro cerebro es real, pero vuestra mente es un mito. La mente es la que dice “pero” y a veces os hace sentir deprimidos, infelices. Como algunos de vosotros que os sentís mal porque hay muy pocos sahaja yoguis. No importa, observad, sed testigos; y este estado de testigo es el “Sahaja Sthiti” (estado Sahaja). En él os hacéis personas muy sutiles, tan sutiles que nada os puede perturbar, sois vuestro Ser.

Ved la naturaleza. Sabéis que existen 92 elementos, de los cuales ninguno puede convertirse en otro. Por ejemplo: no podéis convertir la plata en oro o el oro en plata. Los átomos están organizados de tal manera que tienen determinadas valencias. Además de los átomos, las moléculas también están organizadas; si intentáis cambiar su estructura entonces creáis bombas de todo tipo, atómicas, etc.; algo completamente destructivo. Solo los seres humanos pueden cambiar y transformarse. Ved la bendición que es para un ser humano poder transformarse en otro elemento nuevo que es el Ser. Esta es la especialidad del ser humano.

Sin embargo, hay personas que han estado con falsos gurus y cuando estos intentan manipular algo en las personas, ese algo explota. He visto que quien ha estado con falsos gurus todavía se desmaya, tiene problemas, les ocurre esto más que a otros que no han tenido gurus. A pesar de ello están bien, han mejorado muchísimo. Debéis entender una cosa y es que, en cierta manera, cuando analizáis algo o cuando rompéis un átomo o molécula intentando transformarlo, éstos explotan, no funciona. Por el contrario, cuando sintetizáis podéis crear cualquier cosa en la naturaleza: como todo este plástico que veis aquí, es algo sintetizado. La materia puede sintetizarse y unirse.

Los seres humanos también deben sintetizarse, pueden hacerlo mejor que la materia, porque ellos cambian, se transforman. Por ejemplo, con el oro hacemos joyas, al transformarlo siempre sigue siendo oro; el oro es oro. Aunque este oro sea ahora una joya, sigue siendo el elemento oro. Pero los seres humanos se transforman. Hay una tremenda diferencia entre la materia y la naturaleza y los seres humanos. Materia y naturaleza son completamente distintas a los seres humanos. Cuando los seres humanos se transforman lo hacen a través de un proceso viviente en el que se convierten en flores. Aunque no de la misma manera que en la naturaleza porque la naturaleza no tiene mente y está totalmente bajo el control del Divino. Pero vosotros estáis bajo vuestro propio control; sois vosotros los que os controláis. En esta síntesis que se produce en vuestro interior veis que estáis bajo vuestro propio control, sabéis lo que os está pasando.

Comenzáis a veros separados de todas estas cosas. Algunas personas me dicen: “Madre, mi ego es terrible, quítamelo”. Ven su ego, su problema; otros me dicen: “Madre, mi Nabhi está fatal, todavía me preocupa el dinero”. Ven el problema. Así comienza el proceso: con el conocimiento de uno mismo. Lo llamamos autoconocimiento. Pero hay que ir más allá. Este conocimiento os hace “buscar”. En un principio no hay conocimiento, decimos que la gente es ignorante, que hay oscuridad. Ahora que hay luz podéis ver, podéis ver qué problemas hay. Comenzáis a separaros de aquello que vosotros mismos veis que está mal. Veis cuántas cosas absurdas hay: celos, envidia, avaricia, lujuria, codicia. Son todo cosas horribles para ser mencionadas en una celebración de Diwali.

Diwali significa que muchas luces van encendiéndose una a una, y comenzáis a ver, en primer lugar, qué problemas hay; cuando los identificáis, los rechazáis, e intentáis libraros de ellos con el fin de llegar a estar limpios.

Después, este conocimiento también desaparece; no necesitáis tener ningún conocimiento pues ya “estáis” ahí; no necesitáis siquiera saber de vuestros chakras, pues en ese estado nada importa. Os hacéis sólidos como una roca, con vuestro cerebro intacto, con vuestro corazón intacto y con vuestro hígado intacto. No hay nada que os perturbe o moleste. Simplemente gozáis del Amor y la Compasión. Os llegan sus olas que retornan a vosotros. Pero esto llega a desaparecer también y al final no sois otra cosa que “sahaj”.

Este es el estado que mucha gente consiguió en el pasado. Sin embargo se echaron a perder, no podían darlo a los demás; quizá solo uno conseguía ser especial o como mucho, dos.

Sahaja Yoga se basa especialmente en un estado de conocimiento; en primer lugar debéis tener un absoluto conocimiento de vosotros mismos. El autoconocimiento debe ser completo.

En el tercer estado, que se alcanza una vez que el conocimiento es completo, uno debe librarse de todas esas cosas que conoce de sí mismo, que sabe que son inútiles, que detienen el ascenso y que además sabe que están mal. Es cómo cuando cae una mancha en mi sari e intento limpiarla. Así es cómo os separáis de vosotros mismos en este “estado sahaja”.

En Sahaja Yoga desarrolláis una nueva dimensión que es la “Consciencia Colectiva”. Así es el Sahaja Yoga moderno, porque antiguamente los buscadores no tuvieron esto y todos se perdieron. En esta consciencia colectiva sentís a los demás, sentís amor y compasión por los demás e intentáis ayudar a los demás. Sin embargo, a veces os encontráis analizando cuánto dinero podéis ganar, qué conseguiréis siendo líder, etc.

Pero cuando la consciencia colectiva crece, os convertís en una gota del océano, lo cual significa el océano en sí mismo. Pasáis a ser el océano completo. El océano tiene sus propias maryadas y no le preocupa; si tiene que vivir con sus maryadas lo hace y ya está. No desea cruzar sus límites. De la misma manera, vosotros os hacéis autosuficientes, permanecéis en vuestro interior.

Sé que muchos sahaja yoguis están enfadados porque no he castigado a muchas personas indeseables que han estado molestando a Sahaja Yoga. Pero yo no tengo que preocuparme, el Paramchaitanya, que está trabajando tanto, se hará cargo de ellos; ¿para qué voy a preocuparme? Si en cualquier caso todo funciona, ¿para qué entrometerse? Mi trabajo es solo el de observar, ver; eso es suficiente, no hay necesidad de matar o destruir a nadie en esta vida porque ellos se destruyen a sí mismos.

Ya os he explicado que no necesito exponer a la gente, pero en cualquier país que visite, la gente se ve expuesta. Me alejo enseguida de ellos pensando: “Solo Dios sabe qué es lo próximo que va a ocurrir”. Solo el hecho de poner la atención un poco en un país hace que todo esto funcione, incluso sin saberlo yo; luego pienso: “¡Oh, Dios mío!, ¿cuándo hice aquello?”

Por tanto uno se convierte en el Poder del Amor divino, sin duda alguna, pero no lo manipula o maneja; todo queda en manos de este Poder divino que hace funcionar todo, y que además es algo separado de mí, aunque os sorprenda. Yo estoy sola, completamente sola, incluso este Poder está separado de mí, aunque sabe muy bien lo que es bueno para los seres humanos y para Sahaja Yoga. Funciona y trabaja solo, yo no intervengo, es una acción refleja, creedme, es una acción refleja. Quizá vosotros digáis: “¡Madre, Tú lo has hecho!”, bueno, decidlo; pero yo no intervengo, no tengo que decirle nada a este Poder, funciona sin más y trabaja muy bien.

Os daré un ejemplo. Hace mucho tiempo me dijeron: “Madre, nos gustaría tener un verano muy largo”. Les dije: “¿Por qué pedís cosas así? “¡Oh sí, Madre!, nos gustaría tener un verano muy largo”. Y tuvieron un horrible y tremendamente largo verano en Londres. Allí las casas no tienen aire acondicionado o ventiladores como tenemos en India, ni siquiera hay abanicos. No había nada. Nosotros dormíamos en una galería que había en la casa. Fuimos a una tienda de Londres a por un ventilador y nos dijeron: “Haga la petición, llegará en tres meses”. Nos darían el ventilador para cuando ya hiciera frío. De modo que mi hija nos envió dos desde India, por avión. Así nos las arreglamos. Nosotros, los hindúes, pasamos mucho calor, porque en nuestro país tenemos muchísimo sol, por eso pasamos mucho más calor que cualquiera de vosotros. No podemos entender cómo os sentáis a tomar el sol. En India se dice: “Sólo un inglés y un perro loco pueden ponerse a tomar el sol”. Esta es nuestra situación, nosotros no podemos estar al sol porque ya hemos tenido mucho en India. Ese verano era terrible pero finalmente ocurrió algo bueno: las hojas comenzaron a coger un color ocre, después rojizo y en aquel momento todos los colores del otoño aparecieron con todo esplendor.

En ese tiempo ocurrió que un sahaja yogui soñó que yo le llamaba y le decía que viniese con el coche a la parte de atrás de mi casa. Él le contó el sueño a todos los demás sahaja yoguis. Entonces le telefoneé sin saber nada acerca de su sueño y le dije: “¿Puedes venir? Me gustaría ir a ver este hermoso otoño de Inglaterra”. Salimos con el coche y recorrimos muchísimos kilómetros. Lo que nos sorprendió es que nos dijo que todo eso era nuestro terreno, después de haber recorrido tantos kilómetros. Era tan hermoso, parecía Canadá. Toda Inglaterra se vestía con la belleza del otoño.

Por tanto, si algo así ocurre, siempre se ve compensado, todo se compensa. Toda la gente salía fuera a ver la belleza del otoño, la belleza de los colores de la naturaleza, todos los verdes, amarillos, ocres… había una gran variedad de colores y lo sorprendente es que en un país así, uno nunca ve todo esto. Se trataba de una compensación al hecho de haber tenido tanto sol; fue compensado por el Paramchaitania, de todas estas cosas se hace cargo el Paramchaitania. Yo no hago nada, yo soy Niskriya. Para mi nada importa, todo está funcionando gradual y firmemente. Quizá vosotros me digáis: “Madre hemos rezado pidiéndote tal cosa y eso ha funcionado”. Puede ser, puede ser que sea así; pero en ese caso, quizá son las deidades las que han escuchado lo que vosotros pedíais y han hecho el trabajo; yo no soy responsable, no soy responsable en absoluto.

Lo mismo ocurrió con el caso de esta mujer que tenía un hijo muy enfermo y estaba a punto de morir; vivían en Méjico. La madre me escribió tres cartas diciéndome que su hijo estaba a punto de morir y que era muy joven, iba a la Universidad de Harvard. Yo nunca hice nada, nunca contesté sus cartas, nada y sin embargo recibí una cuarta carta diciéndome que su hijo estaba completamente curado. Yo me encontraba plácidamente sentada, en un lugar muy lejano a ella, entonces, ¿cómo es que esto ha funcionado?

Por tanto, podéis ver que todas las cosas que pensáis que hago yo, en realidad las hace este Paramchaitanya. De hecho estoy absolutamente separada de Él, absolutamente. Se dice que debemos rezar y pedir; si lo hacéis, hacedlo a estas deidades, a todos estos ganas que están aquí alrededor y no a mí. Yo no tengo nada que ver con ellos, ellos no me dicen a mí lo que tengo que hacer, por tanto, ¿por qué habría de decirles: haced esto o haced aquello? Esto es así, y solo cuando así se manifieste podréis decir que os encontráis en el “estado Sahaja”, entonces no desearéis nada, no querréis nada.

Hago todo tipo de cosas, igual que el sol, en el sentido de que también cuido de las flores, de muchas cosas; recibo regalos vuestros; pero en realidad yo no recibo nada, no tengo nada, de hecho no tengo ningún interés en ello; si queréis ofrecerme estas cosas porque os da gozo, vale, muy bien, hacedlo; si queréis poner flores, muy bien, ponedlas, a mí personalmente, no me importa. Esto os lo digo como persona, ahora bien, como Madre, os amo a todos, a todos vosotros y al mismo tiempo no hago nada para amaros, mucha gente me dice: “Madre, nos amas tanto”. Y respondo: “¿Por qué, por qué decís que os amo tanto? ¿Qué es lo que hago? Ni siquiera os he dado un beso como muestra de afecto”. Sin embargo, vosotros siempre decís que os quiero mucho. Entonces, ¿qué es todo esto? ¿Quién esta haciendo que todo esto funcione? Yo no, es algo que esta más allá de mí, es precisamente el estado al que ascendemos y que se llama “Sahaja Sthiti”. En este estado de testigo se siente que uno no hace nada, que simplemente todo funciona.

Ahora bien, si por deciros esto me decís: “Ah, entonces, ¿por qué deberíamos extender Sahaja Yoga? No es nuestro trabajo”, es que no estáis en ese estado. Por tanto deberíais ascender hasta ese estado y esto solo es posible cuando tenéis conocimiento de vosotros mismos y del mundo entero. También podéis ir más allá del conocimiento. Habréis observado ya muchas veces cómo cuando menciono algo, eso mismo ocurre; y yo no es que sienta las vibraciones de nadie, ni siquiera mi propia Kundalini ni los chakras, nada. Sin embargo, lo sé todo, absolutamente todo, como si fuese un ordenador. Y al mismo tiempo, no soy un ordenador. Es un problema, porque es muy difícil explicar lo que es este estado, uno tiene que alcanzarlo y una vez lo alcanzáis os encontráis en un estado muy sutil. Este estado sutil, no es otra cosa que dicha, sin embargo, tampoco gozáis de esta dicha.

Por ejemplo, yo no sé cómo gozar de todo. Supongamos que decís “¡Jai Mataji!”, me olvido completamente de que os estáis refiriendo a mí y digo con vosotros también “¡Jai, Mataji!”

En realidad se trata de entender una cosa muy simple y es que -en el estado que tenéis que alcanzar- todo funciona sin hacer nada. Si ese es vuestro estado, muy bien, pero no es así. Tenéis que alcanzar ese estado, en primer lugar a través de la acción, obteniendo el conocimiento; después este conocimiento ya no es necesario, pero primero debéis conseguir todo esto.

El significado del Diwali es que ponemos luces por todas partes, es decir que Sahaja Yoga se extiende por todas partes. Pero, ¿sabe la luz de sí misma? ¿Sabe el candil o la lámpara de aceite de sí misma? La luz lo ilumina todo, pero no lo sabe. Como la Luna, que nos da su luz, ¿acaso lo sabe ella? ¿Goza con ello? De la misma manera lo que ocurre en el día del Diwali es que vosotros ilumináis a muchas personas, les ilumináis, hacéis este trabajo, y es una buena idea, está muy bien que lo hagáis. Pero sabed que también tenéis que convertiros en aquella lámpara que ni siquiera es consciente de sí misma.

Por tanto, hay dos mensajes. El primero es que debéis iluminar al mundo entero, tenéis que iluminar a los demás. Este es el primer mensaje. Y en segundo lugar tenéis que convertiros en la luz, luz que no sabe que lo es. Ayer cantabais una canción que decía: “Tú eres la luz, eres esto y aquello”. Vale, ¿qué más da? Yo realmente no sé si soy la luz. Finalmente se llega a un estado en el que uno no sabe lo que es. Uno no sabe que es la luz, simplemente esto no viene a vuestra cabeza. Ya veis cuántas veces habéis cantado los mil nombres y otras canciones que dicen muchas cosas, pero nunca me viene a la cabeza que se trata de mí, que esas letras hablan de mí.

La verdad es que no sé cómo vais a reaccionar con todo esto que os estoy diciendo, porque el ser humano es de tal manera que su reacción podría ser que su ego subiera inmediatamente diciendo: “¡Oh, sí, sí! Yo también soy esto y aquello”. De hecho hace un tiempo muchos llegaron a pensar así: “Nosotros somos seres incluso más elevados que Mataji”. “Puede ser, puede ser”. Hay muchos que han llegado a pensar así. Hay un individuo que anda por ahí diciendo que él es Kalki. Bueno, muy bien, no importa; es Kalki, muy bien, es muy buena idea. Pero si yo digo que soy la Adi Shakti esto realmente implica que no sé lo que soy. Tengo que decíroslo. Mucha gente ha llegado a decirme: “¡Madre, pero si Tú misma lo has declarado!” Y yo digo: “¿Qué es lo que he declarado?” ¿Qué he declarado, el qué? Soy lo que soy. Y observo ahora que la gente, por el hecho de esta afirmación, ha comenzado a imaginar cosas falsas, pero nadie necesita declarar o afirmar nada sobre sí mismo. Este es el estado que tenéis que alcanzar. Ahora bien, para llegar a ese estado tenéis que trabajar, y trabajar significa extender Sahaja Yoga, tenéis que encender muchas luces; lo cuál significa que os habréis dado cuenta de que sois vosotros la luz que está encendiendo la luz de los demás. Entonces, de una forma sutil os dais cuenta de que sois la luz.

Hay muchos sahaja yoguis que están haciendo un gran trabajo, están haciendo muchas cosas y extendiendo Sahaja Yoga. Esto es algo grande. Está ocurriendo en muchos países donde ha desaparecido la oscuridad de la religión, la oscuridad del racismo y de otros muchos movimientos negativos. Toda esta limpieza ha tenido lugar para que podáis bañaros en agua limpia. Cuando hacéis todas estas cosas, de repente os dais cuenta de que gradualmente todo va quedando limpio y simplemente lo veis, lo observáis. Espero que en esta vida consigáis este estado en el que podéis dar la completa autorrealización a los demás. Aquellos que no dan la Realización a los demás y que sin embargo vienen a todos los pujas, etc., no son más que personas mediocres, no pueden ascender mucho. Venir a un puja significa que ascendéis muy alto en el puja y luego descendéis otra vez, pero aquellos que crecen gradualmente y firmemente alcanzarán ese estado, y espero que en esta vida. Puedo ver a todas estas grandes personas emitiendo paz, emitiendo luz, porque de hecho son luz. No tienen que iluminar, sin embargo son la luz. Tenéis que trabajar por este estado y desarrollarlo dentro de vosotros.

Este estado ha sido descrito por muchos poetas y santos, pero ellos ya se encontraban en este estado; y la gente, al leer lo que escribían, pensaba que estaban locos, como ocurrió con Cristo que fue crucificado, no le entendían. Pero ahora vosotros estáis creciendo uno a uno y paso a paso, ahora lo entendéis todo, comprendéis a Cristo y a los demás. En el nivel en el que estáis todavía tenéis que trabajar, aquellos que no trabajen por Sahaja Yoga no ascenderán mucho, tenéis que trabajar por Sahaja Yoga y extenderlo al máximo. Tenéis que gozar de la compañía de los demás, de los hermanos y hermanas, debéis tener todas las cualidades de una gran persona. Hasta que no alcancéis esto no podréis ascender más alto, a ese estado del que os he estado hablando, el “estado sahaja”, estado en el cual sois perfectos, pero antes todavía debéis libraros de muchas cosas.

Hoy también es el día de Mahalakshmi y lo primero que os diría es algo respecto a esta locura del dinero. Debéis entender que no es otra cosa que una locura. Los que son ricos no tienen dinero. Preguntadle a un hombre rico y veréis, os contestará: “No, no tengo dinero”. ¿Y cómo es eso? Entonces, ¿qué es todo esto? Luego le preguntáis a un pobre, “¿tienes dinero?” Y contesta: “No, no tengo dinero”. Por tanto, todo este asunto del dinero es como una especie de avaricia que nunca se ve satisfecha. Todas estas pequeñas cosas tienen que desaparecer, y vuestro trabajo os tiene que limpiar. Cuando estéis trabajando o haciendo el trabajo os daréis cuenta de si os limpiáis o no. Mientras estéis haciendo el trabajo veréis si estáis bien o no. Este proceso ha de tener lugar antes que nada; y después, estoy segura de que muchos de vosotros alcanzaréis ese estado, y todo esto en mi tiempo de vida. En este día del Diwali quería deciros que tenemos que hacernos personas más y más sutiles. No deberíamos vernos influenciados por cosas externas, como por ejemplo, las modas. La gente que sigue la moda es gente estúpida, son como una masa ciega a la que cualquiera podría conducir a cualquier punto; les decís “haced esto” y lo hacen, “haced aquello” y lo hacen. Si seguimos cualquier pensamiento que nos ha sido dado por alguien, al hacerlo nos perdemos completamente, perdemos nuestra identidad y nos hacemos llamar cristiano, musulmán, hindú, etc. Esto es absurdo, es una estupidez. Vosotros sois el Ser, sois el Espíritu. Cuando os convertís en el Espíritu llegáis a saber muchas cosas, y este conocimiento es muy importante. Esta es la distancia que hay entre una persona normal y un santo, distancia que vosotros habéis cruzado muy poco a poco, por lo tanto conocéis los problemas de los seres humanos así como la manera de tratar con ellos.

La consciencia colectiva es algo que se ha manifestado solamente en estos tiempos modernos y en Sahaja Yoga. Esta consciencia colectiva también la tuvieron los santos, pero nunca hablaron de ella, nunca dijeron nada, no les preocupó. Sabían si cierta persona tenía muy mal algún chakra pero pensaban, pues nada, si es lo que él quiere, que se vaya al infierno. No es que no les preocupase, sino que no se ocupaban de ello. Ellos se encontraban en un estado en el que simplemente grababan las situaciones. Les daba igual si ante el espejo se ponía un hombre feo o una persona hermosa. Esta gente simplemente dejaba pasar a las personas; pero nosotros debemos entender que aún debemos crecer, debemos trabajar y aquellos que están haciendo que todo funcione y que están extendiendo Sahaja Yoga deben saber que el Paramchaitanya es su sirviente. He visto cómo algunas personas han deseado algo y se ha cumplido, ha funcionado, piden algo y se cumple. Ahora bien, ¿qué debemos tener para que ocurra esto? Esa es la cuestión. Después de la Realización y de haber recibido tantas bendiciones, lo que desarrollamos es una completa fe en nosotros mismos; fe en que somos el Espíritu, fe en que tenéis la luz y que tenéis que iluminar a los demás. Cuando esta fe se hace más y más profunda de repente sentís: “Oh, ¿quién soy yo? Soy el Espíritu”, y si sois es el Espíritu toda la naturaleza está con vosotros.

Conozco un grupo de sahaja yoguis, de los que uno de ellos es pescador. Tiene una tremenda fe en mí; estaba haciendo el trabajo de Sahaja Yoga y tenía que ir al pueblo de enfrente a hacer un programa. Al salir de su cabaña vio que había nubes muy negras en el cielo. Subió la mano y dijo “tengo que ir a hacer el trabajo de Madre, así que no os atreváis a soltar ni una gota de agua. Quedaros ahí tal y como estáis hasta que termine mi trabajo”. La cuestión es que él tenía que ir al pueblo de enfrente en barco. Los demás sahaja yoguis no sabían de qué estaba hablando. Todos subieron al bote, cruzaron el río, dieron la Realización a la gente del pueblo de al lado y volvieron a casa. Al llegar y cerrar la puerta de su cabaña les dijo a las nubes. “Ahora podéis empezar a soltar agua”, así es cómo se las arregló.

Por tanto, debéis tener fe en que el Paramchaitanya es vuestro sirviente y está esperando constantemente a que le pidáis algo. Cualquier cosa que digáis se cumplirá. Pero primero debéis tener fe en vosotros mismos, fe en que sois un sahaja yogui.

Aunque veo que todavía la gente tiene mucha lujuria en su interior y muchas cosas horribles, así que en primer lugar estableceros firmemente en el dharma, como sabéis dharma significa rectitud. Si estáis en el camino recto, de buena conducta, sin lugar a dudas el Paramchaitanya os obedecerá. Pero, aun así, supongamos que hoy pedís algo y mañana no se cumple; sentirse molesto por esto tampoco es buena cosa, sentirse mal ya es de por sí una señal de inmadurez. ¿Por qué vamos a tener que sentirnos decepcionados o sentirnos mal por algo? Quizá eso era lo mejor para vosotros. Supongamos que me pierdo en el camino y en lugar de ir por donde debía, voy por otro lado. Qué más da, donde quiera que esté sigo siendo yo misma, además después descubro que verdaderamente tenía que ir por donde fui, porque tenía que ver a una persona y al ir por ese camino me encontré con ella. Estas cosas veis que ocurren incluso conmigo. Además, incluso si no encuentro a esa persona, da igual, quizá tenía que ir por ese camino para dejar algunas vibraciones o por cualquier otra razón. De hecho, cualquier cosa que hacéis bajo un control absoluto, o mejor dicho, con una fe absoluta… la verdad es que toda vuestra autoridad os viene a través de la fe que tengáis, fe en sánscrito se dice Satta, que significa Verdad, la Verdad es la que os da la autoridad, si tenéis una fe absoluta, es decir Verdad con vosotros, entonces tenéis una plena autoridad y la autoridad es tal que os autoriza a vosotros, no a los demás. Esta autoridad opera, sin lugar a dudas. He visto que opera mucho en algunos sahaja yoguis incluso que no tienen estudios, que son personas muy simples, muy sencillas y son sin embargo, personas muy poderosas, son sahaja yoguis muy poderosos y lo que tienen es una gran fe.

Otra palabra muy importante en sánscrito es ¿…? que significa Paciencia. Debéis tener paciencia, si no tenéis paciencia y queréis que las cosas se hagan en seguida entonces, ¿cómo vais a ver funcionar todo el proceso? Hay muchas personas que están muy agitadas y que se mueven muy de prisa, pero este mundo ya se mueve a demasiada velocidad y sois vosotros los que debéis detenerlo observando esta carrera de locos. Vosotros no sois uno de ellos, debéis tener paciencia. Debéis tener plena fe en vosotros mismos y paciencia. Hay que ver cómo está funcionando Sahaja Yoga o cómo lo está haciendo funcionar el Paramchaitanya. Si las cosas son de esta manera, muy bien, en todo ello hay algún significado y si funciona de otra manera también lo tiene.

Otra cuestión muy importante es la fe en vuestro guru. Si tenéis fe en vuestro guru el Paramchaitanya es amable con vosotros y os ayuda, pero si tenéis dudas acerca de vuestro guru entonces también el Paramchaitanya tiene dudas de vosotros porque el Paramchaitanya os conoce a través de vuestro guru, tanto si se trata de mí como de otro guru verdadero. Sin embargo, en mi caso, como soy una persona que perdona excesivamente, algunas personas tienden a tomarse ciertas libertades conmigo. Cualquier otro guru golpearía a su discípulo o le haría hacer cualquier penitencia si no se cumpliese con lo debido. Ya os he contado muchas anécdotas de cómo, incluso los verdaderos gurus, solían tratar a sus discípulos. Pero yo perdono siempre, digo: “Déjalo, no importa”. Porque creo que solamente dejando a las personas libres, por sí solos, es como podrán ascender a este estado. Sin embargo, a veces puede ocurrir al revés, que cuando se perdona a una persona, entonces lo da todo por sentado. Está bien, dadlo todo por sentado si queréis, hay libertad, uno puede hacer lo que quiera, uno puede perderse, yo no tengo nada que decir.

Por tanto, tened fe en vosotros mismos y paciencia para observar. No os sintáis decepcionados con nada en absoluto. Hay tantas personas con su Realización, tantos santos ahora en el mundo. Ya oísteis ayer cómo cantaban los franceses, recuerdo en el pasado que tuve que coger el armonium y enseñarles a cantar incluso la primera línea; estuve media hora intentando enseñarles a cantar pero no lo conseguí. Y ya veis qué nivel de creatividad han alcanzado ahora. De la misma manera todo vuestro potencial se desarrollará y se expresará, pero tened cuidado de no caer en el ego. Todo florecerá y aquellos que os rodean recibirán vuestra fragancia que les atraerá a Sahaja Yoga. La verdadera bendición divina es que lleguemos a ese estado de perfección, de plenitud, un estado completo. Pero juzgaros a vosotros mismos y preguntaros: “¿Sois uno con sahaja? ¿Estáis dedicados plenamente a Sahaja Yoga o hay todavía otras cosas que son más importantes para vosotros?” Pues seguid, seguid con ello si queréis.

Una cosa debe quedar muy clara y es que en Sahaja Yoga no hay competición, no puede haberla. No hay competitividad, no existe el enemigo. Solo hay personas diferentes, pero todos santos, con estilos muy diferentes, lo cual está muy por encima de todas estas cosas. No podéis ser deshonestos, no podéis engañar a la gente y si todavía estáis haciéndolo, sabed que aún tenéis que crecer mucho. Algunas personas piensan que son especiales o muy elevadas en Sahaja Yoga, no es así, esto no es así. De hecho cuando pensáis que sois algo, os perdéis. Vuestro criterio debe ser: ¿Qué he hecho?, ¿a cuánta gente he dado la Realización?, ¿a cuánta gente he hablado de Sahaja Yoga? Muchas personas se sienten tímidas a la hora de hablar de Sahaja Yoga. En cierta ocasión me encontraba con una señora que emitía mucho calor, había estado con un guru y empezó a hablar de él sin parar; sin embargo, un sahaja yogui se siente tímido a la hora de hablar de Sahaja Yoga; tendrán cientos de amigos, pero a ninguno de ellos les hablarán de Sahaja Yoga. Irán a un montón de fiestas donde todos beberán y dirán: “No, no voy a beber”; pero no dirán “no bebo porque soy un sahaja yogui, y un sahaja yogui, por naturaleza no puede beber”.

Por tanto, esta es la tercera cuestión: la comunicación, el anuncio de Sahaja Yoga. Debéis tener fe en vosotros mismos y anunciar, comunicar Sahaja Yoga. Todos los santos del pasado lo hicieron y fueron asesinados por ello. A Sócrates, como sabéis, le dieron veneno; pero no importa, nadie os va a matar en estos tiempos modernos, os lo aseguro, nadie os va a matar, pero debéis anunciar Sahaja Yoga con plena fe en vosotros mismos y con pleno conocimiento de lo importante que es. El propósito es transformar al mundo entero, con vuestra transformación el mundo entero se transforma, así de simple es Sahaja Yoga, aunque también puede parecer algo muy complicado. Por ejemplo, como sabéis, el otro día falló el micrófono, yo estaba dando la charla y sin embargo todo el mundo seguía oyéndome perfectamente, ¿qué ocurrió?, ¿acaso entré yo en el éter? No lo sé, ni siquiera sabía que el micrófono se había estropeado porque todo el mundo seguía escuchándome con atención, sin embargo después dijeron que en la casete la mitad de la charla no se podía escuchar porque no había micrófono.

Uno tiene que preguntarse y al mismo tiempo apreciar lo que está pasando, ¿a dónde vamos?, ¿a dónde nos dirigimos? Nos dirigimos al Reino de Dios, entonces toda la dicha y el gozo será nuestro. Todo el conocimiento, todo, se convierte en una cosa que es dicha. Uno entra en un estado de dicha en el que ni siquiera es consciente de estar ahí y la bendición más grande es que uno no sabe nada, simplemente está ahí.

Espero que todos vosotros consigáis este estado después de haber celebrado este Diwali Puja en Portugal, que es el lugar de Mahalakshmi. Ella se apareció aquí, como todo el mundo dice y también tenemos aquí este swayambú con el rostro de Mahalakshmi, así que, espero que todo esto contribuya a que funcione en vosotros. Os estoy hablando en realidad de un estado muy sutil, pero os tengo que decir que uno debe intentar llegar a ese estado y es un estado muy, muy fácil de alcanzar para todos vosotros. Una vez lleguéis allí, veréis cómo todo el trabajo se hace solo, llegaréis a un pueblo o ciudad para hacer algo y veréis cómo todo funciona por sí solo. Habéis visto cómo ha funcionado en El Cairo, donde al llegar todo el mundo me estaba saludando. Yo me pregunté: “¿Qué ha pasado aquí?” Lo mismo ocurrió en Leningrado donde miles de personas vinieron a verme. Les pregunté: “¿Cómo es que habéis venido a mi programa?” Todos contestaron, es obvio, hemos visto su cara en un anuncio del periódico, es obvio que usted es una persona divina. Esto es lo que debería pasar y así anunciaríais Sahaja Yoga sin timidez. Muchas personas no se atreven a hablar de Sahaja Yoga con sus amigos, podéis anunciar que Sahaja Yoga es el único camino y además debéis saber que si no, todas las personas que amáis acabaran en el infierno, en el limbo o, ¿dónde? Si habéis llegado arriba debéis darles la mano para que puedan subir también. Puede que sean personas no muy buscadoras, al menos por ahora. En realidad creo que los buscadores ya se han terminado o por lo menos eso es lo que parece; parece que las personas que tenéis ahora no buscan mucho.

Que Dios os bendiga.